MADRID, 1 Mar. 2019 (Europa Press) – El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos ha asegurado este viernes que aún hay miembros de Estado Islámico en el último enclave del grupo en Siria, contradiciendo el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la toma de la totalidad del territorio que controlaban los yihadistas en el país árabe.
Trump afirmó el jueves que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) se habían hecho con el control del enclave, en la localidad de Al Baghuz y sus alrededores. «Acabamos de terminar de tomarlo (el territorio)», dijo.
«Han estado escuchando que era el 90 por ciento, el 92 por ciento del califato (de Estado Islámico) en Siria. Ahora es el cien por cien lo que hemos tomado, el cien por cien del califato», zanjó.
Sin embargo, el Observatorio, con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha recalcado que aún quedan cientos de yihadistas y sus familiares en el interior de Al Baghuz, tras varias semanas de evacuaciones de civiles y miembros de Estado Islámico ante el avance de las FDS.
Así, ha detallado que al menos 260 integrantes del grupo yihadista siguen presentes en la zona y se niegan a rendirse, al tiempo que ha señalado que la propia coalición internacional que lidera Washington ha llevado a cabo bombardeos este mismo viernes en el lugar.
El anuncio de Trump, formulado desde la base conjunta Elmendorf-Richardson de Alaska durante una parada para repostar tras su cumbre en Vietnam con el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, llegó además horas después de que el jefe de las FDS, Mazlum Kobani, asegurara que en una semana sus milicianos conseguirán la «victoria completa».
«Anunciaremos la victoria completa frente a Estado Islámico en una semana», dijo Kobani, en un discurso ante un grupo de combatientes de las FDS que han sido liberados del último enclave de Estado Islámico junto a la frontera con Irak.
Las FDS, una alianza de combatientes árabes y kurdos liderada por los milicianos kurdos sirios de las Unidades de Protección Popular (YPG) y con el apoyo de las fuerzas militares estadounidenses, están combatiendo contra Estado Islámico para expulsar a sus milicianos de su último bastión en el este de Siria, la localidad de Baghuz.
Las FDS iniciaron el pasado 9 de febrero su ofensiva para expulsar a Estado Islámico de Al Baghuz, la única zona que aún está bajo su control en el país. El grupo yihadista había quedado recluido en algunos puntos de Deir Ezzor, en la orilla oriental del río Éufrates y cerca de la frontera con Irak –donde fue derrotado militarmente a finales de 2017–, y zonas del desierto sirio.
Estado Islámico ha seguido perpetrando atentados de forma frecuente en Irak y ha lanzado varias ofensivas en los últimos meses en Siria para intentar expandir sus territorios y reducir la presión a la que se está viendo sometido, si bien no ha tenido éxito.