“El coste de alojamiento de los animales abandonados el año pasado, así como los gastos veterinarios que hubo que asumir para su atención, reparaciones diversas imprevistas del parque de maquinaria municipal, los arrendamientos de vehículos para el servicio de obras, liquidaciones de obras en zona rural y gastos derivados de los servicios de gestión de residuos son las actuaciones que engloban el grueso de facturas de 2017 que habrán de abonarse con cargo al remanente de tesorería. El 19,33 % del remanente de tesorería se destinará abonar dichos pagos.”, explicó Gabriel Rodríguez, portavoz del gobierno local.
“El Presupuesto de Gastos no es capaz de prever con exactitud qué va a ocurrir a lo largo del ejercicio y es absolutamente imposible que todas las facturas de un ejercicio entren en el Ayuntamiento antes del 31 de diciembre del mismo año. Casi el 40 % de los gastos pendientes de abonar se deben a una facturación tardía de los proveedores que las enviaron en 2018. El resto son determinados gastos que se han llevado a cabo en el ejercicio anterior correspondientes a suministro de bienes y prestaciones de servicios, todos ellos necesarios e indispensables para el normal funcionamiento y desenvolvimiento de los distintos servicios municipales. La Administración local ha de ajustar su actuación a la agilidad y eficacia que demanda el vecindario. Es por ello que, en ocasiones para dar pronta respuesta a la ciudadanía, la situación administrativa no se ajusta estrictamente al rígido procedimiento legal. Los presupuestos municipales, cuando se aprueban, no son inalterables y el marco legal permite varios tipos de modificaciones presupuestarias como la aprobada para imputar los gastos sobrevenidos con cargo al remanente” – señaló el portavoz municipal
“La modificación presupuestaria prevista tiene la finalidad de ampliar el límite del Presupuesto de Gastos, en la cantidad exacta para cubrir las citadas facturas que hubo que asumir para prestar los servicios municipales. Teniendo además en cuenta que (tal y como se explica en el informe de la Intervención municipal) el reconocimiento de estos gastos no tendrá incidencia alguna en el cumplimiento del principio de estabilidad presupuestaria así como en el cumplimiento de los objetivos de la regla del gasto, aprobamos esta modificación de crédito para agilizar el pago pendiente a los proveedores”, señaló el portavoz municipal.
“Consideramos necesario y obligado atender los gastos incurridos para evitar el perjuicio a terceros contratantes con este Ayuntamiento y el correlativo enriquecimiento injusto. Al pretender abonar las mismas con parte del remanente disponible no causará perjuicio a la atención de necesidades del ejercicio corriente. Las facturas que se someten aprobación se corresponden a prestaciones de servicios y suministros de bienes por parte de terceros de los que consta factura acreditativa de cada uno de los gastos debidamente conformada por los responsables de los distintos órganos gestores del gasto. A todos los grupos políticos se les entregó copia detallada de la relación de dichos gastos”- añadió el edil.
“La comisión informativa de Hacienda celebrada el pasado lunes aprobó con el voto favorable del PSOE y las abstenciones del PP y SOMOS (IU no asistió) el reconocimiento de las facturas pendientes para las que no había consignación, por dos causas, gastos extra sobrevenidos o facturación tardía en Enero de 2018 de proveedores, cuyo importe asciende a 303.438,25 euros y la tramitación de la modificación de crédito necesaria para abonar dichas facturas a los proveedores con cargo al remanente de tesorería. Corresponderá al próximo Pleno el reconocimiento de estas obligaciones que no pudieron tramitarse por falta de consignación. Acuerdo a adoptar con el quórum de mayoría simple”, – concluyó Gabriel Rodríguez.