Berlín/Wolfsburgo, 18 ene (dpa) – El ex presidente de la junta directiva de la automotriz alemana Volkswagen, Martin Winterkorn, comparecerá el jueves ante la comisión de investigación del Parlamento alemán, en su primera gran intervención pública desde que estallara el escándalo de la manipulación de los motores diésel.
Un apasionado de la técnica, un mánager obsesionado por los detalles que tomaba cada decisión importante. Ésa era la imagen que se tenía de Winterkorn. Ahora, casi un año y medio después de que saliera a la luz el fraude aún quedan cuestiones claves por resolver, como qué sabía y cuándo tuvo constancia de las manipulaciones o si es posible que no supiera nada.
El 22 de septiembre de 2015 VW publicó un breve videomensaje de Winterkorn. Cuatro días antes los organismos de medio ambiente de Estados Unidos habían dado a conocer el fraude de los datos de las emisiones de los tubos de escape de los motores diésel de la mayor automotriz de Europa. Con semblante tenso el ejecutivo prometió esclarecer por completo lo ocurrido y habló de «errores terribles de unos pocos».
Lo que se desprende hasta día de hoy de las informaciones proporcionadas por VW es que un grupo de ingenieros de la clase directiva media y alta, pero por debajo de la junta directiva del grupo, fue responsable de la manipulación de unos 11 millones de autos en todo el mundo, que sumió a la automotriz en la peor crisis de su historia.
A pesar de algunos indicios de que Winterkorn ya sabía de los problemas antes de septiembre de 2015, hasta ahora no se ha conseguido probar. El día después del vídeo dimitió de su cargo. «Lo hago en interés de la empresa, aunque no he tenido constancia de ningún error», declaró entonces. Hasta hoy en día ésa ha sido la última declaración pública de Winterkorn tras el escándalo.
Esto cambia ahora. El jueves el ex presidente ejecutivo de VW comparecerá ante los diputados alemanes encargados de esclarecer desde cuándo el Gobierno alemán tenía constancia de las manipulaciones y cómo de estrecha era la coordinación con el lobby automotor.
Se desconoce en qué medida se manifestará al respecto Winterkorn y se espera que en algunas preguntas guarde silencio, sobre todo, en lo relativo a las investigaciones de la Fiscalía de Braunschweig, que analiza, entre otras cosas, la acusación de manipulación del mercado. Winterkorn, así como el director de marca de VW, Herbert Diess, y el ex director financiero Hans Dieter Pötsch están acusados de haber informado demasiado tarde de las consecuencias del fraude con las consecuentes pérdidas para los inversores.
VW sigue manteniendo su postura de que la cúpula directiva no tuvo constancia hasta el 3 de septiembre de 2015 del software ilegal instalado en los automóviles en Estados Unidos para manipular el nivel de emisiones y así cumplir con los límites fijados por las autoridades de ese país.
Hasta ahora los investigadores no han encontrado prueba alguna por escrito entre la enorme montaña de documentos que pruebe que hubo constancia del escándalo antes de que estallara. ¿Informaron verbalmente a Winterkorn? Por otro lado, ¿cómo de fiables son los testigos principales de la Justicia estadounidense que declaran que los máximos cargos de VW estaban informados de lo que ocurría?
Por Andreas Hoenig y Jan Petermann