Los ingresos anuales brutos de los graduados universitarios catalanes se han reducido un 14,98% entre 2011 y 2014, en un periodo en que «han aumentado mucho» los salarios bajos.
Entre los años 2008 y 2011, primeros años de la crisis, la reducción de los salarios fue del 2,11%, según el estudio ‘Efecto de la crisis en la inserción laboral de los graduados universitarios’.
El coordinador del estudio, Marc Sàez (UdG), explicó durante una jornada de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Catalunya (AQU) que en este periodo el empleo de los graduados ha empeorado y se ha «precarizado».
Explicó que este descenso en los salarios «se ha concentrado» en los salarios medios, que han pasado a ser bajos, y que las áreas más afectadas han sido las humanidades y las ciencias sociales.
En el periodo entre 2008 y 2014, el porcentaje de graduados universitarios con salarios inferiores a 12.000 euros aumentó, paralelo a la reducción de los salarios medios, de entre 18.000 y 20.000 euros anuales.
A partir del primer trimestre de 2009, la probabilidad de que el graduado trabajase se redujo un 26,43%, siendo la reducción más grande la que se produjo entre 2011 y 2014, aunque el impacto ha sido menor que si no tuviera estudios universitarios.
El estudio constata que la crisis ha reducido la probabilidad de tener una jornada de trabajo a tiempo completo en un 25,51%, ha aumentado en un 277,24% que la duración del contrato fuese de menos de un año y también ha crecido un 14,45% que el graduado continuase sus estudios.
Sàez afirmó que otra de las consecuencias ha sido la reducción de la satisfacción del graduado respecto a las perspectivas de mejora en el trabajo y su nivel de retribución.