La Aemet confirma que el último año hidrológico en España ha sido el más húmedo desde 2020, marcando un respiro para embalses y ecosistemas.

El año hidrológico tiene en cuenta las lluvias caídas entre el 1 de octubre de un año y el 30 de septiembre del siguiente, y no coincide con un año natural porque parte de las precipitaciones del otoño y del invierno pueden acumularse en forma de nieve y no fundirse hasta la siguiente primavera.
Esa caracterización de las precipitaciones se adapta mejor al ciclo del agua que el año natural porque la mayor parte de la lluvia y nieve que cae durante el año hidrológico tiene su escorrentía -es decir, transcurre por los ríos- entre el 1 de octubre de un año y el 30 de septiembre del siguiente.
La Aemet apunta este jueves en sus redes sociales que el año hidrológico 2024-2025 tuvo “un carácter húmedo” al concluir con 683,7 litros por metro cuadrado de precipitación acumulada en el conjunto de España, lo que supone un 7% por encima de la media del periodo de referencia entre 1991 y 2020, que son 649,1 litros por metro cuadrado.
“Se trató del año hidrológico más lluvioso en España desde 2020”, según la Aemet. Los anteriores fueron 2019-2020 (710,8 litros por metro cuadrado), 2020-2021 (653,2), 2021-2022 (514,2), 2022-2023 (591,7) y 2023-2024 (680,7).
Meteorología indica que “las lluvias fueron superiores al promedio normal en casi todo el país, excepto en zonas de Galicia, comunidades cantábricas, áreas del sureste y los archipiélagos”.
En el año hidrológico 2024-2025 se superaron los 2.500 litros por metro cuadrado en zonas del oeste de la provincia de A Coruña. En el lado contrario, en Fuerteventura no se llegó a 80 litros por metro cuadrado.
MES A MES
Los datos de la Aemet sobre el último año hidrológico, recogidos por Servimedia, indican que los últimos 12 meses tuvieron superávit de lluvias casi siempre, con un 89% más de lo normal al concluir octubre de 2024, que fue extremadamente húmedo, y un 28% más al finalizar noviembre, que resultó muy seco. El primer trimestre acabó un 1% menos lluvioso de lo habitual al finalizar el pasado diciembre, también muy seco.
Enero fue húmedo y entonces el año hidrológico acumulaba una cantidad de precipitaciones similar a la normal y febrero finalizo seco y con un déficit de un 3%. El punto de inflexión llegó con un marzo muy húmedo (el tercero más lluvioso en España desde 1961) que llevó a un 23% más lluvias que de costumbre al ecuador del año hidrológico.
Durante las tres primeras semanas de marzo hubo un episodio de lluvias generalizadas. Ese episodio fue provocado por un póker de borrascas profundas (Jana, Konrad, Laurence y Martinho) que ayudó a aliviar la sequía meteorológica de larga duración, que comenzó en la primavera de 2023.
El año hidrológico encaró su segunda mitad siempre con más cantidad de lluvia recogida respecto a lo normal: un 17% más al acabar abril, un 16% en mayo, un 13% en junio, un 13% en julio, un 11% en agosto y un 7% en septiembre.