Berlín, 8 mar (dpa) – El Gobierno alemán se mostró dispuesto a apoyar un acuerdo de las Naciones Unidas contra la basura de plástico en los mares, según una respuesta parlamentaria del Ministerio germano de Medio Ambiente al grupo de los Verdes a la que tuvo acceso a dpa.
«Un acuerdo bajo los auspicios de las Naciones Unidas puede reducir los residuos plásticos, por lo que el Gobierno lo apoya», dice la respuesta ministerial. Dado que estas negociaciones pueden ser largas, serán necesarios realizar otras esfuerzos de forma paralela.
El Ministerio germano de Medio Ambiente, dirigido por la socialdemócrata Svenja Schulze, enumera 17 convenciones y acuerdos contra la contaminación medioambiental con residuos plásticos.
Si se implementaran mejor que hasta ahora podrían contribuir a una «reducción significativa», pero no es suficiente, dicen. Por eso, el Gobierno está «firmemente comprometido» con el fortalecimiento y desarrollo de los acuerdos y apoya que el tema forma parte de la agenda de las reuniones del G7 y el G20.
El lunes comienza la Conferencia sobre el Medio Ambiente de la ONU, que tendrá lugar durante cinco días en Nairobi (Kenia). El asunto de los residuos plásticos y la basura en los mares está en la agenda. Más de 100 millones de toneladas de basura contaminan los océanos, y se estima que anualmente se suman 10 millones de toneladas más.
En el año 2050, se prevé que los océanos contendrán más plástico que peces, advirtió la ONU el año pasado.
Esta realidad es dramática para los peces, aves y mamíferos marinos. Se enredan en viejas redes y cuerdas, o confunden la basura con comida. Cuando ésta se fragmenta en pequeñas partículas microscópicas, también puede llegar a la cadena alimentaria humana.
Algunos hábitats de la Antártida ya están contaminados por estas micropartículas y otros productos químicos dañinos, como demostraron las investigacines de Greenpeace.
La portavoz medioambiental de los Verdes en la Cámara Baja del Parlamento alemán, Bettina Hoffmann, dijo a dpa que «el Gobierno alemán admite que los acuerdos anteriores no son suficientes». Pero cuando se trata del compromiso con un acuerdo global vinculante, el Ministerio de Medio Ambiente sigue siendo blando, apuntó.
«El entusiasmo y el compromiso genuino con una nueva convención deben ser diferentes», criticó. El objetivo debe ser detener la entrada de plástico en los océanos en 2030, sentenció.