5 abr (dpa) – El Bayer Leverkusen está cerca del doblete, con la Bundesliga y la Copa Alemana a su alcance, pero su entrenador, el español Xabi Alonso, advirtió hoy que aún no hay nada decidido al recordar los fantasmas del pasado.
El Leverkusen, líder invicto en sus 40 partidos de la temporada, visita este sábado al Union Berlin con 13 puntos de ventaja respecto al segundo clasificado de la Bundesliga. Y regresará a Berlín para disputar la final de Copa el 25 de mayo, donde son grandes favoritos contra el Kaiserslautern, de segunda división.
Asimismo, el club renano también está en cuartos de final de la Europa League. «La situación es muy buena en este momento. Podemos conseguir grandes objetivos en todas las competiciones», declaró hoy el técnico vasco.
«Estamos en una posición en la que podemos ganar algo. Pero esto no se acaba hasta que se acaba. En el fútbol pueden pasar muchas cosas», afirmó Alonso.
El Leverkusen no levanta un trofeo desde el título de la Copa Alemana de 1993, con varios fracasos cercanos, incluidas tres finales de Copa perdidas y cinco subcampeonatos de la Bundesliga, que le valieron la dudosa distinción de «Vizekusen», porque siempre quedaba segundo, que en inglés se transformó en «Neverkusen», porque nunca ganaban.
En 2000, perdió en el campo del descendido Unterhaching en la última jornada, mientras el Bayern Múnich se hacía con el título de la Bundesliga.
Dos años más tarde, el Leverkusen desperdició una ventaja de cinco puntos en la liga en las tres últimas jornadas, en las que el Borussia Dortmund terminó campeón, y en los once días siguientes también perdió las finales de la Copa Alemana y de la Liga de Campeones, contra el Schalke y el Real Madrid, respectivamente.
«Los aficionados se acuerdan de Unterhaching y del pasado. Son pacientes. Queremos celebrarlo cuando haya algo que celebrar», dijo Alonso.
«El objetivo está claro. Quedan siete partidos de Liga. Queremos dar el siguiente paso en Berlín», añadió.
Alonso tiene la plantilla al completo para enfrentarse al Union, un equipo de la zona media de la tabla al que definió como «un equipo fuerte y físico, pero también bueno con el balón»
«Tenemos que estar preparados desde el saque inicial», alertó.
Si el Leverkusen evita la derrota, igualará el récord de imbatibilidad del Bayern Múnich en la Bundesliga de hace 10 años en los 28 primeros partidos de una temporada.