Mónaco, 23 may (dpa) – Tras dos victorias seguidas de Lewis Hamilton, el alemán Sebastian Vettel necesita dar este fin de semana un golpe de efecto en las calles de Mónaco para encender la pelea por el título mundial de la Fórmula 1.
«Dije muchas veces que Ferrari es fuerte y tiene mucho potencial. Pero también debemos asegurarnos de abordar los problemas que tenemos y de trabajar juntos en la dirección correcta», afirmó el alemán, hoy segundo en la tabla a 17 puntos de su rival de Mercedes.
En el Gran Premio de España, hace dos semanas, Vettel tuvo una larga lista de inconvenientes. Primero: tiempos no muy competitivos. Segundo: problemas en los neumáticos. Tercero: poca fiabilidad.
«Para Mónaco han cambiado nuevamente muchas cosas en el coche», señaló Vettel. «Pero incluso si fuéramos excelentes, no debemos olvidar que aún tenemos mucho por hacer», agregó el germano, que en Barcelona solo pudo ser cuarto.
Después de dos victorias prometedoras en el inicio del campeonato, el nivel de Ferrari está en duda, más aún con la notable actuación de los Mercedes en Cataluña, donde hicieron el uno-dos. Vettel, sin embargo, expresó que no era «alarmante». «Hasta ahora fue una sorpresa que tuvieran un momento tan difícil», indicó el alemán.
En Mercedes, en esa medida, están satisfechos. Hamilton y su compañero, el finlandés Valtteri Bottas, afirman que han llegado a un equilibrio. «Sin embargo, no lo vemos como un punto de inflexión», dice Toto Wolff, jefe del equipo.
Al igual que Hamilton, Vettel tiene dos victorias en Mónaco, el célebre trazado callejero de 3.337 kilómetros. La última de ellas fue el año pasado, cuando el alemán consiguió la primera victoria de Ferrari en el principado desde que Michael Schumacher ganara en 2001.
En 2017, después de una mala clasificación, Hamilton alcanzó a saltar del décimo tercer al séptimo lugar. Este año, el equipo alemán espera una dura pelea por el podio.
«Red Bull es fuerte en las curvas lentas y cuando la velocidad máxima en las rectas es menos decisiva. Ferrari dominó allí el año pasado», reconoció Wolff, que admite el favoritismo de la «Scuderia».
«Serán realmente rápidos y difíciles de superar», señaló Hamilton sobre los Red Bull.
Daniel Ricciardo y Max Verstappen, los pilotos de la escudería de las bebidas energéticas, se frotan las manos con el posible botín. Sería un gran final para el Gran Premio número 250 del equipo en la máxima competición automovilística.
No obstante, lograr una buena posición el sábado en la clasificación será indispensable en un trazado de mucho frenado y rectas cortas. Porque los adelantamientos nunca son tan difíciles como en el Principado, donde los entrenamientos libres se celebran el jueves, un día antes de lo habitual.
Los de Red Bull todavía no lograron un podio este año. Y la última vez que un piloto que no salió entre los tres primeros logró la victoria fue en 1996. Entonces el francés Olivier Panis firmó una carrera sensacional y terminó en lo más alto. A veces Mónaco entrega grandes sorpresas.
Por Martin Moravec (dpa)