Berlín, 20 oct (dpa) – Inmediatamente después quebrar la racha de derrotas, el Union Berlín le mostró los dientes al campeón alemán Bayern Múnich de cara al próximo enfrentamiento por la novena fecha de la Bundesliga.
«La próxima semana también venceremos a los bávaros», aseguró el defensor Keven Schlotterbeck tras el 2-0 contra el Friburgo el sábado.
El recientemente ascendido Union Berlín, que ganó por primera vez después de cuatro derrotas, logró alejarse de la zona de descenso y pretende ahora molestar a los bávaros el próximo sábado.
«Para muchos es la primera vez en Múnich, vamos a ir allí con espuma en la boca», dijo Schlotterbeck.
La segunda victoria de la temporada contra un Friburgo ofensivamente decepcionante le devolvió a los berlineses mucha confianza.
Por primera vez, no encajaron ningún gol en contra y no cometieron errores graves. Los jugadores desplegaron todo su talento, tal como lo hicieron en los mejores momentos de la segunda liga: mucha agresividad en los duelos, una enorme voluntad de correr y balones largos pusieron en aprieto al rival del sur.
¿Pero será suficiente para Múnich? «Ellos necesitan un día muy malo y nosotros necesitamos uno muy, muy bueno», destacó Christopher Trimmel. «Pero no puedes ir allí y asustarte», recalcó el capitán del Unión Berlín.
Por supuesto que el equipo del múltiple campeón alemán es «muy, muy bueno, incluso en el banquillo», admitió Trimmel.
Pero también quedó demostrado que el imbatible equipo bávaro de los últimos campeonatos también es vulnerable, entre otros con el débil 2-2 del sábado ante el Augsburgo.
Los berlineses están aún muy lejos de complicarle la vida a los mejores equipos de la Bundesliga. La segunda victoria en casa, sin embargo, fue un gran alivio para el conjunto capitalino.
«Fue una gran actuación de mi equipo, y finalmente fue recompensado. Esto es decisivo para el futuro del campeonato», dijo el entrenador Urs Fischer.
Los goles de Marius Bülter (25′) y del danés Marcus Ingvartsen (84′) lograron colocar al equipo en el tercio inferior de la tabla con siete puntos.
Según Fischer no es un motivo para celebrar, pero destacó la importancia del triunfo.
«No significa que las cosas vayan a seguir saliendo tan bien. Hay que seguir trabajando y estar bien preparados para el próximo partido», afirmó.
Por Thomas Wolfer (dpa)