Berlín, 21 nov (dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, se ha decidido: quiere seguir siendo la presidenta de la Unión Cristianodemócrata (CDU) y presentarse por cuarta vez a unas elecciones. ¿Qué significa personalmente esto para la política de 62 años, para los conservadores y para el país?
Merkel fue muy criticada durante la crisis de los refugiados, también dentro de la CDU y de su partido hermanado, la Unión Cristianosocial (CSU). ¿Que tan difícil fue tomar la decisión de volver a presentarse?
Merkel no dice cuándo tomó la decisión. Sólo, que desde el verano ha pensado cada día en ello. Qué tan de cerca estuvo de su renuncia es algo que no quiere revelar. Fuera de Alemania es vista como el último baluarte de los valores liberales de Occidente tras la victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos, algo que ejerce una gran presión sobre ella. Sin embargo, Merkel advirtió: nadie puede salvar al mundo solo.
¿Existe el peligro de que ahora muchas personas reclamen un cambio después de ocupar tanto tiempo el despacho de la Cancillería, como le sucedió al ex canciller Helmut Kohl?
Existen críticos que aún reclaman una salida de Merkel. Sencillamente quieren algo nuevo, una nueva cara, nuevos pensamientos. No obstante, la situación de Merkel y la situación en Alemania es diferente a la vivida por Helmut Kohl y Alemania poco antes de su derrota electoral en 1998.
En esa época, Occidente no conocía el terrorismo islamista, Estados Unidos era el gran aliado, el populismo de derechas apenas era patente. Muchos ciudadanos quieren hoy en día, sobre todo, seguridad y estabilidad. Ésta podría ser la baza de Merkel, ya que al menos internacionalmente ha quedado certificado que es eso lo que busca. Y a diferencia de Kohl, no siempre ha gobernado con el mismo socio, sino que junto con el Partido Liberal también ha formado Gobierno con el Partido Socialdemócrata (SPD) y también podría hacerlo con Los Verdes en un futuro.
¿Cómo quiere cumplir con las expectativas internacionales de ser el baluarte contra Trump, Putin y Erdogan?
Merkel seguirá haciendo política sobre la base de los valores occidentales. Sus declaraciones del domingo por la tarde a favor del respeto de todo el mundo, se pueden entender también como un reto contra Trump, que en campaña electoral ha mostrado poco respeto por las minorías. En lo que se refiere a Turquía, se encuentra ante un dilema. Por un lado, detesta el comportamiento del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, contra los medios y la oposición, pero por otro, la Unión Europea (UE) necesita el acuerdo sobre refugiados firmado con él. Mientras, intenta mantener unido a Occidente contra el presidente ruso, Vladimir Putin, en cosas como las sanciones por el conflicto en Ucrania.
¿Cuándo cederá su puesto a la cabeza de la CDU?
Merkel dice que las personas nunca están sin alternativa. Siempre puede haber alguien que pueda asumir el cargo. No es el caso para el periodo electoral de 2017 hasta 2021, cómo ella misma acaba de dejar claro. ¿Y qué pasará entonces? ¿Un quinto mandato? ¿O irá preparando el camino a su sucesor a lo largo de su futura legislatura? «Preguntas hipotéticas sobre cuándo hago qué y demás cuestiones no están realmente en mi punto de mira ahora. No debo responderlas ahora, sino a finales del mandato», respondió Merkel.
Merkel dijo en 1998, que no quiere ser una «piltrafa medio muerta» de la política. ¿Cómo se siente hoy en día?
Eso es algo que sólo sabe su marido, Joachim Sauer. Al ser preguntada al respecto en el programa de Anne Will, Merkel contestó: «Me miré al espejo y creo que todavía no lo soy».
Por Kristina Dunz y Jörg Blank