Washington (dpa) – El presidente estadounidense, Donald Trump, volvió a distanciarse hoy de su ex jefe de campaña Paul Manafort, cuyo proceso judicial por acusaciones de fraude fiscal y estafa bancaria comenzó el martes.
«Paul Manafort trabajó para Ronald Reagan, Bob Dole y muchos otros líderes políticos altamente conocidos y respetados. Trabajó para mí en un período muy corto de tiempo», dijo Trump en su cuenta de Twitter. «¿Por qué el Gobierno no me dijo que él estaba bajo investigación?», continuó.
Manafort, de 69 años, está acusado de ocultar a las autoridades ingresos millonarios derivados de su trabajo como asesor político en Ucrania.
Se trata del primer juicio que se ha puesto en marcha como consecuencia de las investigaciones sobre las supuesta intromisión de Rusia en el proceso electoral estadounidense de 2016, aunque esta causa no está relacionada directamente con el núcleo de las pesquisas.
Trump se refirió al caso como «viejas acusaciones» que «no tienen nada que ver con conspiración – una farsa!», agregó. También calificó al equipo de la fiscalía a cargo de la investigación como «una desgracia para Estados Unidos» que lleva adelante el «trabajo sucio» del fiscal especial en el caso, Robert Mueller.
Manafort dirigió entre junio y agosto de 2016 la campaña de Trump y estuvo presente por ejemplo en el congreso del Partido Republicano en el que fue nominado el hoy presidente.
«Esta es una situación terrible y el fiscal general Jeff Sessions debería parar ahora mismo esta caza de brujas montada antes de que continué manchando aún más a nuestro país», añadió Trump.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, salió luego a aclarar que las declaraciones de Trump no eran instrucciones para Sessions y que el presidente sólo había expresado «su opinión». «El presidente ha permitido que se desarrolle este proceso, pero él cree que es tiempo de que llegue a su fin», agregó.
Las investigaciones que dirige Mueller intentan aclarar básicamente si durante la campaña electoral de 2016 existió un pacto secreto entre el equipo de Trump y Rusia para beneficiar al magnate republicano. En este contexto, los investigadores comenzaron a examinar de cerca los negocios de Manafort en Ucrania.
Sessions decidió retirarse de las investigaciones de la trama rusa por parcialidad. La razón eran sus propios contactos en Rusia, sobre los que en un principio mintió en un interrogatorio en el Congreso.
Trump se enfadó mucho con su salida de las investigaciones. El presidente señaló que esa decisión de Sessions sólo sirvió para que fuera nombrado Mueller.