¿Cómo detectar un dolor de rodilla por rotura de menisco? Muchas veces no sabremos de dónde proviene el dolor, pero es posible que lo sintamos con mayor intensidad en la parte interna o externa de la rodilla. Todo dependerá del menisco lesionado.
La rodilla tiene dos meniscos. El menisco interno tiene forma de letra C, aunque también se puede comparar con una media luna, y es un poco más abierto que el menisco externo, el cual es tan cerrado que casi parece un círculo.
El menisco interno es el que está adherido a la cápsula de la articulación, por lo que tiene el movimiento más limitado y, por lo tanto, es el más propenso a sufrir lesiones y roturas.
Con los años, estas láminas cartilaginosas situadas entre los huesos de las rodillas se van deteriorando y su capacidad elástica también va disminuyendo, pero este tipo de lesiones no solo se producen en personas mayores. Un movimiento brusco o una mala postura pueden ser suficientes para que el menisco se rompa.
Por lo general, este tipo de lesiones las sufren personas jóvenes que practican deporte como consecuencia de la realización de movimientos de rotación muy violentos, pero esto no significa que personas más sedentarias que no ejercitan adecuadamente los músculos y articulaciones puedan tener una lesión con un sencillo gesto, como levantarse.
Los meniscos son los encargados de asegurar la articulación y de dosificar el peso que soporta esta parteel cuerpo, evitando las rozaduras entre los huesos y el desgaste de los componentes de las rodillas.
Son también una de las zonas donde más dolores se generan debido a que soportan casi el 40% de todo el peso que recae en la rodilla.
Síntomas de rotura de menisco
- Aparece dolor, sobre todo a los lados de las rodillas.
- Cuando se produce una rotura, puedes llegar a escuchar un chasquido o notar una punzada en la zona de la rodilla.
- Inflamación de rodilla (leve o grave) en las próximas horas. Esta se produce por el derramamiento del líquido de la rodilla. En el caso de que se perciba sangre, significa que la lesión ha afectado también a un ligamento o ha llegado a nivel óseo.
- Dolor al flexionar o al extender la rodilla.
- Bloqueo total o parcial de la rodilla, lo que impedirá que puedas extenderla.
- Después de pasar un largo rato sentado, es posible que tengas dificultades para levantarte y mantenerte erguido.
- La estabilidad de la rodilla es dudosa.
Si la lesión es pequeña, las molestias y la inflamación tardarán pocos días en desaparecer.
Tratamientos para aliviar el dolor de rodilla por rotura de menisco
Independientemente de que se trate de una lesión leve o grave, es imperativo acudir al médico para que realice la revisión pertinente y nos asigne un tratamiento adecuado, que puede ir desde un simple reposo hasta una intervención quirúrgica.
En el supuesto de que se trate de un daño menor de los meniscos, se pueden realizar terapias de frío. Esto supone reposo durante, al menos, dos días y mantener las rodillas elevadas, mientras se aplican compresas de hielo en 4 periodos de 10 ó 15 minutos al día.
En su lugar, se puede recurrir a un tratamiento más novedoso y efectivo que reduce los síntomas, el dolor y la inflamación principalmente, y facilita la recuperación de la rodilla. Hablamos de ActiPatch®, un microdispositivo terapéutico que se vale de la energía de los campos electromagnéticos para aliviar los dolores musculares y articulares, así como los generados por una inflamación, un traumatismo o una distensión.
Su funcionamiento es muy simple. Basta con colocarlo en la zona afectada y sujetarlo con la cinta adhesiva que contiene el dispositivo.
Mantenerse activo y hacer ejercicio de forma regular nos ayudará a fortalecer nuevo cuerpo y evitar posibles lesiones.