(dpa) – A principios de noviembre Google compró Fitbit, el fabricante de wearables.
De esta manera el gigante de Internet tendrá acceso a los datos almacenados de fitness y salud de los 28 millones de usuarios activos de Fitbit, según advirtió la organización de consumidores del estado federado alemán de Renania del Norte Westfalia.
En un comunicado, Fitbit prometió que los datos recolectados de los usuarios no serán vendidos ni utilizados para publicidad. Pero desde protección del consumidor lo contemplan con una mirada crítica: en primer lugar los usuarios deben creer esta afirmación y confiar que esta promesa se mantendrá.
También hubo una promesa similar desde Facebook tras la adquisición de WhatsApp, que fue rota dos años después.
LA CUENTA DE FITBIT PUEDE BORRARSE… CON CONSECUENCIAS
Los usuarios de Fitbit que quieran impedir de entrada que sus datos lleguen a Google deberán borrar su cuenta. Pero a la vez deberán aceptar que, sin cuenta, no funcionarán todos los servicios de Fitbit, advierte la organización germana.
Antes de eliminar la cuenta, en todo caso deben descargarse los propios datos. Ingrese con su registro a la página web de Fitbit, haga clic en el engranaje en la esquina superior derecha para abrir los ajustes y elija «Exportación de datos».
Quien quiera borrar por completo su cuenta de Fitbit, entonces debe ir a «Ajustes personales» y allí «Borrar cuenta». Se abre una ventana emergente en la que se debe confirmar la acción por primera vez con una contraseña.
Posteriormente se recibirá un correo electrónico, donde hay que dar una última aprobación a la eliminación de la cuenta, a través de un clic en un link en el email.