Hamburgo, 11 ene (dpa) – Tras casi una década de construcción y con un costo diez veces mayor que el presupuestado inicialmente se inaugura este miércoles la Filarmónica del Elba, el nuevo templo de la música con el que la ciudad alemana de Hamburgo aspira a convertirse en meca de los melómanos del mundo.
«Con el primer concierto en la sala principal comienza a latir el corazón de la Filarmónica del Elba. Hamburgo envía una señal de la gran importancia que tienen el arte y la cultura en una sociedad libre», dijo en la antesala de la inauguración el alcalde de la ciudad, el socialdemócrata Olaf Scholz.
«La construcción de la Filarmónica del Elba es también una invitación al mundo para que venga a Hamburgo a visitar este lugar excepcional y a disfrutar de la música y de la acústica impresionante», agregó el alcalde en una rueda de prensa horas antes de la inauguración.
El arquitecto suizo Jacques Herzog, quien diseñó el espectacular edificio de cristal junto al río Elba con su socio Pierre de Meuron, se manifestó «contento y agradecido».
«Aquí ven a un director contento porque esta sala es mucho más fantástica de lo que nos hubiéramos imaginado», dijo el director general y musical de la Filarmónica, el austriaco Christoph Lieben-Seutter.
La larga espera tiene su fin con un concierto de la orquesta residente, la Filarmónica del Elba de la radiotelevisora pública NDR bajo la batuta de Thomas Hengelbrock, que ofrece un viaje musical desde el Renacimiento hasta nuestros días y una obra compuesta expresamente para la ocasión por el alemán Wolfgang Rihm.
El presidente federal alemán, Joachim Gauck, la canciller alemana, Angela Merkel y el esposo de ésta, Joachim Sauer, así como el actor Armin Mueller-Stahl y el director de cine Fatih Akin figuran entre los 2.100 invitados a la velada de gala.
La Filarmónica del Elba fue diseñada por Herzog & De Meuron, creadores del Estadio Nacional de Pekín y de la Tate Modern de Londres.
Sobre un viejo almacén de ladrillo del puerto erigieron un cubo de 1.100 paneles de cristal en forma de ola gigantesca. El complejo abarca tres auditorios con aforo de 2.870 personas, un restaurante, un hotel cinco estrellas y 44 apartamentos de lujo.
Su corazón late en la sala principal, construida siguiendo el modelo de la Filarmónica de Berlín, donde la orquesta está ubicada en el centro y a su alrededor se elevan las filas de asientos como terrazas de viñedos.
El auditorio está revestido por paneles de yeso con hendiduras de forma y tamaño disímil, diseñada por Yasuhisa Toyota, un experto en acústica de fama mundial.
El 2 de abril de 2007 fue puesta la primera piedra para la construcción del espectacular edificio, que debía ser inaugurado tres años más tarde, en 2010.
Las obras se demoraron por una planificación insuficiente y desavenencias entre el municipio, los arquitectos y la constructora, que derivaron en pleitos y ocuparon a dos comisiones parlamentarias.
Los costes para el erario público se dispararon de 77 a 789 millones de euros (81 a 831 millones de dólares) y muchos en Alemania creyeron que acabaría en un fiasco como el nuevo aeropuerto de Berlín, que sigue sin funcionar.
«Fue un parto duro, pero los hamburgueses la han adoptado», reconoció el alcalde Scholz, quien en 2013 consiguió dar al proyecto el espaldarazo necesario para su conclusión.