Berlín, 7 nov (dpa) – El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) apuesta por un sistema migratorio por puntos, según expuso hoy el líder de su fracción parlamentaria, Thomas Opperman, durante la presentación de un proyecto de ley que sigue el modelo canadiense.
«Muchas personas tienen miedo de una inmigración desordenada», dijo Opperman. En su opinión, el modelo canadiense permitiría al Estado reclutar a jóvenes cualificados para cubrir la mano de obra que necesita la economía germana.
La propuesta del SPD aboga por que los extranjeros que quieran vivir y trabajar en Alemania reciban puntos siguiendo criterios como la cualificación académica, los conocimientos idiomáticos, la edad, las posibilidades de integración y la demanda profesional en el país.
La propuesta, presentada ya con la vista puesta en las elecciones federales de 2017, no ha estado libre de críticas.
Los Verdes aseguran que la ley complicaría aún más las reglas ya existentes, mientras La Izquierda calificó directamente la iniciativa del SPD de «neoliberal y racista».
Recientemente, representantes de estos tres partidos se reunieron para sondear la formación de un posible Gobierno de coalición a tres bandas tras los próximos comicios previstos para septiembre del año próximo.
El SPD quiere abordar con su actual socio de Gobierno, los democristianos de la CDU de Angela Merkel, la aprobación una nueva ley migratoria antes de las próximas elecciones generales.
La inmigración será previsiblemente uno de los grandes temas de la campaña electoral, debido a la crisis demográfica que sufre el país desde hace años, y también por el debate sobre la seguridad y la llegada de extranjeros al país, incluyendo a cientos de miles de refugiados.
Estudios vaticinan que, sin inmigración, la población alemana caerá de los actuales 82 millones de habitantes a menos de 60 millones hasta 2050. Esta evolución podría provocar que diez millones de puestos de trabajo quedasen sin cubrir durante la próxima década.