(Europa Press) – El Gobierno serbio ha decidido revertir su decisión de expulsar al embajador de Montenegro en un gesto de acercamiento entre los dos países, 24 horas después de que ambos anunciaran la expulsión mutua de sus respectivos embajadores por un caso de presunta injerencia soberana sobre una disputa histórica que data del siglo pasado.
El ojo por ojo comenzó cuando Montenegro declaró al embajador serbio, Vladimir Bozovic, ‘persona non grata’, tras denunciar sus «constantes interferencias en los asuntos internos de Montenegro».
La gota que colmó el vaso fue una declaración formulada el viernes por Bozovic en la que «directamente faltó el respeto» a Montenegro, según Exteriores de Serbia, al describir la decisión montenegrina de 1918 de unirse a la llamada Asamblea de Pogdorica, y su pertenencia al llamado Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos, como un acto de «liberación» y «libre albedrío» del pueblo montenegrino.
El Parlamento de Montenegro declaró nula la decisión centenaria en 2018, al indicar que tal acto fue, en realidad, una anexión forzada que acabó despojando a Montenegro de su soberanía.
Este domingo, no obstante, la primera ministra serbia, Ana Brnabic, ha confirmado que el país va a dar marcha atrás tras una reunión mantenida con el presidente del país, Aleksandar Vucic, en la que se ha decidido que el embajador montenegrino, Tarzan Milosevic, podrá permanecer en el país.
«Belgrado quiere extender una vez más la mano de la cooperación y la amistad», ha hecho saber la primera ministra, en declaraciones recogidas por B92. «Lamento que la verdad se haya distorsionado cada vez más en Montenegro hasta considerar a Serbia como una potencia ocupante en la Primera Guerra Mundial, pero no queremos tener un acto tan hostil hacia Montenegro, por eso hemos tomado esta decisión», ha añadido.
La primera ministra todavía no ha recibido confirmación de Montenegro sobre una correspondiente anulación de expulsar al diplomático serbio. «Espero que entiendan la decisión como un acto de buena voluntad y anulen su decisión esta noche», ha concluido. Aunque Montenegro todavía no se ha pronunciado, el primer ministro montenegrino en funciones, Zdravko Krivokapic, comenzó este domingo lamentando la crisis diplomática y prometió, en un mensaje en su cuenta de Twitter, que su gobierno trabajará para mejorar las relaciones entre los dos países.