Wolfsburgo (Alemania), 24 mar (dpa) – Los actos racistas como el ocurrido durante el partido entre Alemania y Serbia la semana pasada son incidentes aislados, opinó hoy el Comisionado de Integración de la Federación Alemania de Fútbol (DFB), el ex futbolista Cacau.
«Hay que oponerse a ellos, pero al mismo tiempo no hay que prestarles demasiada atención», dijo Cacau al portal de Internet «Focus Online».
Por su parte, el mánager de la selección alemana de fútbol, Oliver Bierhoff, destacó que los insultos racistas proferidos a los jugadores germanos Leroy Sané e Ilkay Gündogan durante el choque internacional del miércoles pasado son un «problema de toda la sociedad».
«No debemos cansarnos de enfrentarlo. Es una tarea que no puede detenerse jamás», enfatizó Bierhoff la noche del sábado en el programa ZDF-Sportstudio de la televisión pública alemana.
Estos insultos causaron sorpresa en el seno de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) donde la diversidad es vista con absoluta normalidad, aseguró el ex delantero.
Tras el partido el miércoles pasado en Wolfsburgo, el periodista André Voigt publicó un vídeo en las redes sociales en el que denunciaba a tres espectadores sentados una fila detrás de él por «insultar continuamente» a Sané y Gündogan.
«Primero, los tres hablaron mal del seleccionador Joachim Löw, de los jugadores y del estadio. En la segunda mitad, los insultos racistas contra Sané y Gündogan continuaron, tres, cuatro, cinco veces, una y otra vez», señaló a dpa el redactor jefe de la revista de baloncesto ‘Five’.
Los tres hombres de entre 30 y 40 años se presentaron ante las autoridades y fueron interrogados por la Policía. El vídeo del periodista alemán tuvo muchas reacciones en las redes sociales, sobre todo de los propios clubes de la Bundesliga.
«No es normal que pase y eso es bueno», dijo el ex jugador del Stuttgart Cacau durante la entrevista. El funcionario no criticó a Voigt, pero afirmó que él habría actuado de otra manera y que habría enfrentado directamente a los implicados de los dichos racistas.
«Pero ya pasó, no hay que agrandarlo más de lo que es», agregó Cacau, de 37 años.
El propio Voigt dijo que había intentado hablar con los hombres que insultaban, pero luego fue atacado y no recibió apoyo de otros aficionados.
Al igual que Bierhoff, también el experto en hinchadas Gunter Pilz ve un aumento del racismo en la sociedad. «Es un espejo de lo que estamos escuchando actualmente en el discurso público».
El periódico berlinés «Der Tagesspiegel» también se refirió al tema: «Si las opiniones de la derecha ya están representadas en el Parlamento, esto alienta a todos aquellos que hasta ahora no se habían atrevido a expresarse así públicamente».
Por su parte, Serge Gnabry, del Bayern Múnich, expresó su preocupación por los actos racistas. «Tengo el mismo color que Leroy», dijo Gnabry al periódico «Bild». «Hay que luchar en contra, nos compete a todos», dijo el jugador de 23 años.
En tanto, Leon Goretzka, del Bochum, llamó a sus compatriotas alemanes a mostrar más coraje. «Vengo de la zona del Ruhr, donde a la pregunta sobre la nacionalidad la respondes diciendo si eres del Schalke, del Dortmund o del Bochum», dijo el jugador de 24 años.