(dpa) – Ignorar las actualizaciones de sistema o de software en móviles, ordenadores y otros dispositivos es arriesgado. Esto se debe a que las actualizaciones a menudo cierran brechas de seguridad de las que pueden aprovecharse los ciberdelincuentes como puerta de entrada.
Quienes utilizan sistemas y aplicaciones obsoletos corren un riesgo de seguridad considerable, advierte el centro de asesoramiento al consumidor del estado federado alemán de Renania del Norte-Westfalia.
Para no perderse ninguna actualización y, en primer lugar, no llegar a la situación de poder rechazar las actualizaciones, la configuración de un dispositivo y sus aplicaciones debe establecerse de modo que las nuevas actualizaciones disponibles se instalen automáticamente.
Sin embargo, especialmente en smartphones y tabletas, hay un pequeño problema cuando se trata de actualizaciones automáticas. Durante la actualización, una aplicación puede reclamar de repente nuevos permisos que acceden a información sensible, como el acceso al micrófono o a los contactos.
Los expertos del centro del consumidor explican que, en el caso de las actualizaciones automáticas, sin embargo, no siempre está garantizado que los usuarios sean conscientes del alcance de la autorización o puedan decidir antes de la instalación de la actualización si quieren conceder las nuevas autorizaciones solicitadas, por lo que los permisos de las apps deben comprobarse a intervalos regulares.
En Android, esta verificación se realiza en «Ajustes/Aplicaciones/Mostrar todas las aplicaciones/Permisos», y en iOS en «Ajustes/Privacidad y seguridad/Informe de privacidad de aplicaciones».
Para evitar que los dispositivos sean descartados solo porque ya no reciben actualizaciones, en la Unión Europea se aplica desde el 1 de enero de 2022 una obligación de garantía del software para los dispositivos vendidos.
En la práctica, resulta problemático que la directiva de la UE no obligue al fabricante a proporcionar actualizaciones de software y a informar sobre ellas, sino al vendedor de un dispositivo.