SINC – Un equipo de investigadores del grupo de Inmunología del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) ha descubierto que una proteína reguladora de la autoinmunidad, denominada AIRE, está menos expresada en los individuos con síndrome de Down. Este hallazgo explica por qué las personas con este trastorno tienen más predisposición a sufrir enfermedades autoinmunes.
El estudio, publicado en The Journal of Immunology, ha utilizado la mayor colección recogida hasta ahora de tejido procedente del timo, un órgano linfático del sistema inmunitario. En concreto, los investigadores analizaron muestras del timo de 19 pacientes con síndrome de Down, recogidas desde el 1995 en la Unidad de Cirugía Pediátrica del Hospital Universitario Vall d’Hebron.
A todos los pacientes se les extrajo el timo después de operarlos de una cardiopatía congénita, ya que en este tipo de operaciones el órgano linfoide siempre se tiene que extraer y no se puede recolocar. Todas las muestras fueron comparadas con las de pacientes con cardiopatías congénitas pero sin el síndrome.
La proteína AIRE está codificada en el cromosoma 21, que es precisamente el que tienen triplicado las personas con Down. Pese a tener tres copias de este cromosoma, los individuos con este trastorno tienen más predisposición a sufrir enfermedades autoinmunes, como la diabetes, la celiaquía y el hipotiroidismo. Para descifrar cómo actúa AIRE en estas personas, los investigadores analizaron su expresión en el timo.
“Al contrario de lo que nos esperábamos, hemos visto que en los pacientes con síndrome de Down la proteína se expresa a niveles inferiores al del resto de personas”, asegura Roger Colobran, autor principal del estudio. Como consecuencia de la poca presencia de AIRE, la expresión de otros genes específicos de tejidos que dependen de esta proteína también está reducida, y por este motivo se produce un fallo en el proceso de tolerancia central que tiene lugar en el timo.
Un órgano fundamental
El origen de muchas enfermedades autoinmunes está en el timo, que es el órgano del sistema inmunitario donde se desarrollan los linfocitos T, encargados de coordinar la respuesta inmune celular. AIRE controla el mecanismo que hace que los linfocitos T ataquen a organismos exteriores como virus, bacterias, hongos o parásitos, y evita que ataquen a las células propias del cuerpo.
No obstante, cuando esta proteína está menos expresada se produce un fallo en el proceso de tolerancia inmunológica que provoca que los linfocitos T puedan atacar células sanas del propio cuerpo, y esto en último término, puede resultar en una enfermedad autoinmune.
Como ejemplo de este ataque contra las células del propio organismo, los investigadores vieron que cerca de la mitad de los pacientes participantes en el estudio desarrollaron con el paso del tiempo hipotiroidismo, que en la mayoría de casos es una enfermedad de origen autoinmune. En estos casos, sus niveles de tiroglobulina en el timo ya eran bajos, lo que implica, según Colobran, que “la poca expresión de AIRE reduce la expresión de ciertas proteínas propias, como la tiroglobulina, y esto facilita la salida de linfocitos T autorreactivos que pueden atacar estructuras propias como la tiroides”.
Este estudio ha contado con la colaboración de investigadores del Hospital Germans Trias i Pujol, y es una de las líneas principales de investigación del grupo de Inmunología del VHIR. El siguiente paso será obtener muestras frescas de timos de pacientes con síndrome de Down para poder hacer estudios funcionales y entender mejor las alteraciones en los mecanismos de tolerancia inmunológica.