Hamburgo, 14 ago (dpa) – Destacados representantes del mundo de la educación, la cultura, la ciencia y la sociedad están preocupados por la capacidad de lectura de los niños en Alemania lo que les ha empujado a hacer un llamamiento a los políticos para que actúen.
En una «Declaración de Hamburgo», firmantes como los escritores Kirsten Boie, Ulla Hahn y Ulrich Wickert, hacen un llamamiento a la política educativa para que se centre mucho más en el aprendizaje de la lectura y la escritura. La petición «¡Cada niño debe aprender a leer!» se lanzará este miércoles en la plataforma Change.org.
«Es dramático que casi una quinta parte de nuestros niños de diez años no sepa leer bien», declaró Boie a dpa. Esta escritora de 68 años, que fue profesora en el pasado, es la iniciadora de la «Declaración de Hamburgo».
Boie encontró alarmantes los resultados de la Encuesta Internacional de Lectura en la Escuela Primaria (IGLU, por sus siglas en inglés) 2016, que reveló que casi una quinta parte (18,9 por ciento) de los niños de diez años en Alemania no pueden leer de tal manera que también entiendan el texto.
En una comparación internacional, Alemania ha pasado desde 2001 del 5º al 21º lugar. «Esperaba una reacción, pero después de unos días el tema había desaparecido de la opinión pública», indicó Boie. «El hecho de que 16 países nos hayan superado demuestra que es posible hacer algo, incluso en países parecidos». Además, Alemania es uno de los países donde el resultado más depende del origen social de los niños, señaló.
La escritora cuenta con el apoyo no sólo de académicos literarios y lingüísticos de diversas instituciones, fundaciones y de la Universidad de Hamburgo, sino que en la lista de firmantes iniciales se encuentran desde Christoph Lieben-Seutter, director de la Filarmónica del Elba de Hamburgo y Kent Nagano, director de la Ópera Estatal de Hamburgo, hasta el antiguo alcalde de Hamburgo Klaus von Dohnanyi.
Los firmantes piden medidas de apoyo temprano en pequeños grupos en las escuelas primarias y más plazas para la formación de profesores con el fin de poder emplear a un número suficiente de profesores de primaria. Además, debe haber bibliotecas, lecturas y programas de lectura, especialmente en las escuelas cuyos alumnos carecen de educación. «Para todo esto se deben asignar fondos suficientes en los presupuestos», reclama la petición. «La lectura no debe ser víctima de los intensos esfuerzos actuales para digitalizar las escuelas».
Después de la escuela primaria, aquellos que no entiendan el significado de lo que han leído, no lo aprenderán en las escuelas de educación secundaria, ya que en estas la lectura ya no se enseña, sino que se presupone, indica la «Declaración de Hamburgo». «La solución a este problema no debe seguir siendo delegada a padres o voluntarios», exigió Boie. «Solo la escuela llega realmente a todos los niños».
Todas las firmas que se recopilen serán presentadas a la ministra de Educación de Alemania, Anja Karliczek, en el Día Mundial de la Infancia, el próximo 20 de septiembre.
«Esperamos encontrar muchas personas en Alemania que demuestren con sus firmas que este tema es importante para ellos», dijo Boie. «La lectura no tiene otro Lobby, el pueblo alemán debería convertirse en realidad en el Lobby de la lectura».