(EP) – La delegación en India de la ONG Oxfam no ha sido autorizada por el Gobierno de Narendra Modi para poder seguir recibiendo fondos desde el extranjero, por lo que la organización teme que su labor se verá «gravemente» afectada, incluidas las actividades relativas a combatir la pandemia de COVID-19.
Con la entrada del nuevo año, el Ministerio del Interior no ha renovado los permisos para Oxfam, presente hasta ahora en 16 estados. Entre los proyectos en peligro están la distribución de oxígeno, equipos médicos y atención sanitaria, según un comunicado de la propia organización.
El principal responsable de Oxfam India, Amitabh Behar, ha defendido la labor «durante décadas» de la ONG en favor de las autoridades, las comunidades locales y los trabajadores en primera línea, con una ayuda «vital» durante la pandemia. «También estamos trabajando con los gobiernos de varios estados para garantizar que se reduce la brecha de aprendizaje en la educación debido a la COVID-19», ha subrayado.
La organización colabora, además, en la atención a mujeres y en la ayuda a distritos susceptibles de sufrir desastres naturales, para hacerlas «resilientes» y lograr una «solución duradera» que les permita responder, por ejemplo, a inundaciones.
Las ONG han denunciado una creciente presión desde la llegada de Modi al poder en 2014 y se estima que serían cientos ya las organizaciones afectadas por el férreo control oficial. La semana pasada, el Gobierno también vetó el acceso a fondos extranjeros para Misioneras de la Caridad, fundada por la madre Teresa de Calcuta.
Amnistía Internacional anunció en 2020 que suspendía sus operaciones en el país asiático después de denunciar el «constante acoso» al que estaba sometida y que incluía la congelación de cuentas bancarias.