(dpa) – Un vistazo al nuevo OnePlus 7 no deja duda de que ya el modelo standard es un teléfono móvil de primer nivel. Procesador Qualcomm más rápido, amplio almacenamiento, cámara novedosa, nueva tecnología de red. Por lo demás, tiene el aspecto de su predecesor con mínimos bordes de pantalla, pequeño notch para la cámara y un precio que va desde los 559 a los 609 euros (625 a 680 dólares).
Pero en esta séptima edición de su smartphone, el fabricante chino emprende un camino nuevo. La versión Pro del OnePlus 7 tiene, en comparación con el resto de la alta gama, un equipamiento, por así decirlo, un poco exagerado. En el OnePlus 7 Pro todo es grande, macizo, pesado. Este smartphone de metal y cristal pesa 206 gramos.
La pantalla es gigante: 6,67 pulgadas, con resolución de 3.120 por 1.440 píxeles, HDR10+ y frecuencia de actualización de 90 Hz. La animación inicial y las nubes animadas de fondo saltan directamente a la vista.
Pero hay algo que falta en un primer vistazo. Exacto. Ningún agujero, ninguna barra. ¿Dónde está la cámara? Sólo hay que tocar la aplicación de la cámara con el dedo, elegir selfie y ya emerge de su marco de metal.
Según promete OnePlus, este mecanismo de módulo extraible aguanta 500.000 activaciones. Para ello está protegida del polvo y los líquidos. Pero si este módulo extraible es un truco simpático, la cámara principal en sí del 7 Pro está llena de buenas ideas. De manera similar a Huawei y Samsung, también OnePlus apuesta por un trío de gran angular, cámara principal y zoom.
El sensor principal con estabilizador óptico de última generación y 48 megapíxeles consigue una fiel reproducción de los detalles, más luz y menos interferencias en la imagen, asegura OnePlus. A ello se suma un teleobjetivo de 8 megapíxeles y una lente gran angular de 117 grados y 16 megapíxeles.
En la vida cotidiana, esta cámara triple ofrece imágenes con muchos detalles. Con el apoyo del software en el mismo aparato e incluso con poca luz también se consiguen buenas fotos.
En el interior del OnePlus 7 Pro sigue la exhibición de recursos. El procesador Qualcomms Snapdragon 855 es acompañado por una memoria RAM de 6,8 o 12 GB. Para almacenar fotos y apps, hay 128 o 256 GB de espacio. No soporta tarjetas de memoria.
En resumen, el OnePlus 7 Pro es pesado y grande. Pero justamente por ello se sostiene sólido y estable en la mano. A ello se suma una pantalla que, al menos hasta ahora, no tiene precedentes, una cámara equipada para competir de igual a igual con sus rivales y un rendimiento correcto.
En todo caso, OnePlus compite en los precios. El modelo Pro, que se consigue a partir de 709 euros (unos 790 dólares), es comparativamente barato. La competencia ya superó los mil euros en tecnología similar.
El OnePlus 7 Pro está a la venta desde el 21 de mayo. El nuevo modelo standard OnePlus 7 le seguirá en junio.
Por Till Simon Nagel (dpa)