(EP) – La Asociación Benéfica Geriátrica (ABG) ha lanzado su proyecto social navideño #NigúnMayorSinRegalos, con el que recorrerán 12 centros hospitalarios de la Comunidad de Madrid, entregando regalos a las personas mayores ingresadas en Navidad.
La iniciativa que celebra su sexta edición, se ha adaptado a las circunstancias de la pandemia que no permite el contacto directo con los mayores. Para ello, contarán con el apoyo del personal de los hospitales para la entrega de cada presente con el objetivo de paliar el aislamiento y la soledad de los mayores que sufren en general y, en particular, cuando se encuentran hospitalizados en fechas tan señaladas.
#NingúnMayorSinRegalos se desarrollará hasta el 4 de enero de 2021, repartiendo 1500 regalos en el Hospital Virgen De la Torre, el Hospital Universitario Infanta Leonor, el Hospital Fundación Alcorcón, la Fundación Jiménez Díaz, el Hospital Universitario Rey Juan Carlos, el Hospital Gregorio Marañón, el Hospital General de Villalba, Hospital Universitario Infanta Elena, Hospital Universitario Príncipe de Asturias, Hospital Central de la Cruz Roja, Hospital Universitario Ramón y Cajal y el Pabellón Francisco Silvela del Hospital Gregorio Marañón.
Tras la pasada edición, 100 voluntarios repartieron 1.500 regalos en 12 hospitales. En ediciones anteriores, el proyecto contó con Rozalén o el cómico J. J Vaquero, implicados personalmente en el reparto de regalos, y otros rostros conocidos, como «Los Morancos», la actriz Beatriz Rico, la jugadora de la selección española de Baloncesto, Laura Nicholls, los actores Eduardo Velasco y David Muro, que se implicaron en la campaña audiovisual para animar a los voluntarios a la participación.
Este año, debido a la pandemia, los voluntarios de ABG no podrán recorrer las habitaciones de cada hospital dando abrazos y repartiendo villancicos, emoción y conversación a los mayores hospitalizados.
Según los expertos en materia gerontológica, estas visitas se traducen en una mejora en el estado de ánimo de los mayores y sus familiares en un momento complicado como es un ingreso hospitalario y más en fechas tan señaladas como la Navidad.
Una de las conclusiones del informe es que la soledad no deseada es un problema real y alarmante en toda la población, que poco a poco se va convirtiendo en una epidemia en mayor medida en las edades más avanzadas, cuando las personas son más vulnerables, sufren aislamiento social y están más necesitadas de la interacción y la ayuda de los demás.
Esta carencia en muchos mayores genera situaciones de aislamiento que repercuten no solo en el estilo de vida, sino también y de manera significativa en el bienestar psicológico, desembocando en problemas de hostilidad, resentimiento, depresión, tristeza y ansiedad, que a su vez reactivan mecanismos neurobiológicos que pueden dañar la emoción, cognición y conductas de salud, como riesgo a adicciones y peor calidad del sueño.