Después de 12 años recorriendo el mundo para las mejores marcas de moda, Sara Bravo se quitó sus zapatos de tacón en un hotel de Beijing, se puso unas chanclas y… decidió que así quería pasar el resto de su vida.
Así nace Chinelas, un proyecto que se desarrolla entre aeropuertos, aviones y ciudades llenas de color: Shangai, Ciudad de Panamá, Los Ángeles, Nueva York, Miami, Barcelona… Imágenes, experiencias y recuerdos que Sara ha atrapado en unos centímetros de caucho.
“Chinelas simboliza el verano, las vacaciones, ese mágico momento del año en el que nos permitimos ser nosotros mismos. Estoy convencida de que, si nos dejaran, estaríamos la mayor parte del año bajo el sol, en la playa, con las Chinelas puestas”, dice la creadora.
De su paso por una importante multinacional de moda, Sara aprendió a encontrar las mejores fábricas por todo el mundo, a elegir telas, materiales, estampados, diseños, colores y tendencias. Y lo más importante: a negociar precios con los proveedores y cerrar la compra. Porque en el mundo de la moda es tan importante saber elegir como saber negociar. A la alza en la calidad y a la baja en el precio.
“Tenía clarísimo que quería hacer unas chanclas económicas pero de la máxima calidad y, estos 12 años, en los que he visitado cientos de fábricas y he conocido miles de proveedores, me han servido para tener una idea muy clara del producto que quería producir. Hay marcas muy conocidas por las que se pagan unos precios exorbitados, incluso prohibitivos. Sin embargo, en cuanto bajas el precio, la calidad también lo hace y pierden el sentido mismo del producto: la comodidad y la durabilidad. Como poco te puedes quedar con las tiras en la mano, hacerte una rozadura o, en el peor de los casos, pegarte un buen resbalón. Por un precio muy ajustado, ahora puedes tener unas chanclas de diseño muy cómodas y que seguirán como nuevas de un verano para otro”, afirma la empresaria.
Desde un punto de vista formal Chinelas están fabricadas 100% en caucho y PVC, son muy cómodas, frescas y no resbalan cuando el pie está mojado. Además, están diseñadas en España y vienen en una bonita y original caja de cartón reutilizable.
La colección 2016 está inspirada en los colores, costumbres y vivencias de los países en los que ha estado la emprendedora:
Panamá: el básico de la marca, tiene un color uniforme negro para chicas y chicos. Ideales ambos para cualquier outfit de verano.
Barracuda: tiene un original estampado formado por escamas.
Kahuna: inspirada en los colores del Océano Pacífico. Su estampado evoca el espíritu libre y relajado de los surferos.
Mykonos: el básico de CHINELAS con un pequeño toque de color en sus tiras, la bandera del Orgullo Gay.
Portobelo: el diseño más divertido y atrevido, inspirado en los colores del Trópico. Su estampado nos traslada a los arrecifes del mar Caribe, los azules, rojos, naranjas y amarillos nos recuerdan a los hermosos corales de su fondo.
Por el momento las Chinelas solo se venderán a través de www.chinelas-online.com, llegando de 2 a 3 días a toda España (península y Baleares). Las chanclas se pueden pagar con tarjeta y Paypal, y a partir de 40€ los gastos de envío son gratuitos.
Hace unos días, para promocionar la web, se lanzó un concurso en Instagram en el que se regalaban unas Chinelas a la foto de pies descalzos que más likes consiguiera bajo el hashtag #necesitomischinelas
Con esta sencilla acción los pedidos y las fotos han empezado a llegar desde los sitios más dispares del globo: Lago de Sanabria, Sevilla, Cancún, Canarias, Roma o Filipinas. No en vano el logotipo de Chinelas respira ese aire étnico que engloba todas las culturas, razas y estilos de vida, con un mínimo común denominador: la alegría y la naturalidad.
Tenemos la suerte de vivir en el país con más sol y calor de este continente, por eso faltaba una marca española de chanclas bonitas, cómodas, de calidad y a buen precio para que llevemos nuestro buen tiempo al mundo entero.
Y este verano, CHINELAS da su primer paso.
www.chinelas-online.com