Colonia (Alemania), 13 sep (dpa) – El Museo Ludwig de Colonia, en el oeste de Alemania, presentó hoy una exposición con más de 100 cuadros de la pintora expresionista Gabriele Münter, que podrá verse a partir de este sábado.
Nacida en Berlín, fue una artista muy productiva que pintó miles de obras, vendió mucho y tuvo sus propias exposiciones en Escandinavia a lo largo de su vida. Sin embargo, después fue sobre todo conocida por su relación con el pintor ruso Vassily Kandinsky.
La gran muestra con más de 100 cuadros, que ya se pudo ver en el famoso museo Lenbachhaus de Múnich, pone de manifiesto el interés de Münter por la experimentación.
La exposición «Gabriele Münter. Pintura sin rodeos» presenta muchas conexiones interesantes. En los años 1899 y 1900, Münter fotografió simples cabañas en Estados Unidos – casi aún en la época del salvaje oeste – que parecían casi abstractas en su amplia extensión. Casas similares reaparecen más tarde en sus paisajes bávaros.
La mayoría de las obras de Münter conservan un estilo expresionista, que en la década de 1920 cambió durante un tiempo por el movimiento artístico de la Nueva Objetividad. En la década de 1930 se adaptó en cierta medida a los gobernantes nazis: dos cuadros suyos donde aparecen excavadoras formaron parte de la exposición «Die Strassen Adolf Hitlers in der Kunst» (las calles de Adolf Hitler en el arte), en cuya inauguración Münter estuvo presente.
Después de la guerra vivió en Murnau, cerca de Garmisch-Partenkirchen, en el sur de Alemania. Apenas podía pagar al panadero y al peluquero, pero guardaba 80 cuadros de su ex pareja Wassily Kandinsky en el sótano detrás de tarros de mermelada.
En 1957 donó las obras de inestimable valor a la ciudad de Múnich, donde se pueden ver en el Lenbachhaus. Esta historia es ya de por sí espectacular, pero la exposición en el Museo Ludwig muestra ahora que Gabriele Münter también debe ser vista como una artista independiente y de gran valor.