Maguncia (Alemania), 9 ene (dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, dejó claro hoy que ve necesario endurecer las leyes tras la oleada de agresiones en masa a mujeres en Nochevieja en Colonia, en el oeste del país.
«Lo que sucedió en Nochevieja son actos criminales repugnantes que exigen también una respuesta rotunda», declaró la líder cristianodemócrata tras la reunión de la cúpula del partido en Maguncia en la que se acordó la denominada «Declaración de Maguncia».
Las modificaciones legislativas son «en interés de los ciudadanos, pero también en interés de la mayor parte de los refugiados», aseguró.
La propuesta contempla que los refugiados pierdan el derecho de asilo si son condenados a penas de prisión o incluso de libertad condicional.
La Unión Democristiana (CDU) también propone reducir los límites para poder llevar a cabo deportaciones de delincuentes extranjeros. Hasta ahora no se puede expulsar a un extranjero de Alemania si es condenado a una pena inferior a tres años.
La mandataria alemana espera poder alcanzar un rápido acuerdo sobre las modificaciones del derecho de asilo con su socio el Partido Socialdemócrata (SPD). «Dentro de poco se aclarará qué cambios podemos acordar», aseguró.
Durante su comparecencia tras los dos días de reunión de la cúpula del partido, Merkel no quiso fijar una fecha concreta para llevar a cabo la «reducción notable» del número de refugiados, como acordó la CDU en diciembre. «Trabajamos con gran presión para lograr una reducción sostenible», declaró.
Merkel insistió en que quiere lograr un «reparto justo» de los refugiados en el interior de Europa y mejorar la situación en los países de origen.
Asimismo, recordó que se esperan avances concretos desde Turquía para limitar la migración ilegal, pero pidió también paciencia y anunció que el gobierno alemán y el turco mantendrán un encuentro el próximo 22 de enero.
Respecto a la introducción de países como Marruecos y Argelia en la lista de Estados seguros de origen, la canciller alemana declaró que aún no se ha tomado decisión alguna. Sin embargo, adelantó que en su opinión «las perspectivas de poder quedarse de estos refugiados son notablemente inferiores a las de otros solicitantes de asilo, como por ejemplo, de Siria o Irak».
Esa lista implica que los ciudadanos de esos Estados no tienen derecho a solicitar asilo y deben ser deportados.
Esta declaración a favor del endurecimiento de las leyes llega después de un intenso debate sobre cómo evitar que se repitan sucesos como los de Colonia en Nochevieja, cuando cerca de 1.000 hombres de apariencia árabe o norteafricana, divididos en pequeños grupos, cercaron a mujeres, las acosaron y les robaron en las inmediaciones de la estación central de trenes. Hasta el momento se han presentado 170 denuncias.
El Ministerio de Interior alemán confirmó el viernes que entre los 32 sospechosos identificados hasta el momento por la Policía federal se encuentran nueve argelinos, ocho marroquíes, cinco iraníes, cuatro sirios, un iraquí, un serbio, un estadounidense y tres alemanes. De ellos, 22 son refugiados.
Este debate llega en un momento en el que Alemania recibe un gran flujo de solicitantes de asilo. En 2015 registró 1,1 millones de refugiados, de los cuales 428.500 proceden de Siria, según informó esta semana el Ministerio de Interior alemán.