Berlín, 13 ene (dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, respaldó hoy los planes de su ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, de utilizar el superávit presupuestario del Estado para reducir la deuda adquirida durante la crisis financiera.
La mandataria calificó la propuesta del titular de Finanzas de «sensata», según señaló el portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, durante una comparecencia rutinaria ante la prensa celebrada hoy en Berlín. Tanto Merkel como Schäuble pertenecen a la Unión Cristianodemócrata (CDU).
«Es razonable utilizar los buenos tiempos presupuestarios para saldar las deudas que fueron contraídas en los malos tiempos para impulsar programas coyunturales», recalcó el vocero.
Sus palabras suponen, en la práctica, un golpe a su socios en el Gobierno, los socialdemócratas (SPD), cuyo líder y vicencanciller del país, Sigmar Gabriel, se mostró partidario en las últimas horas de invertir el excendente financiero en escuelas y en infraestructuras.
El superávit presupuestario del Estado alemán ascendió en 2016 a 6.200 millones de euros (6.580 millones de dólares). Una vez se hicieron públicas las cifras, el actual Gobierno de coalición abrió un debate sobre la posible utilización de los fondos.
«Si tenemos que rehabilitar las escuelas dentro de cinco años o quizás más tarde, seguramente en ese entonces sea mucho más caro y los tipos de interés serán más altos», insistió hoy el vicecanciller Gabriel en la radio pública alemana.
Como telón de fondo del debate abierto en el empleo del superávit presupuestario se encuentra la celebración de las elecciones generales que tendrán lugar previsiblemente a finales del mes de septiembre.
Desde que Angela Merkel anunciase a finales de 2016 que concurría por tercera vez como candidata a la cancillería y a pesar de que el SPD todavía no ha presentado a su candidato para los comicios, los políticos alemanes han entrado en una especie de campaña electoral oficiosa y aprovechan cualquier oportunidad para mostrar sus diferencias ante los votantes.