Berlín, 13 mar (dpa) – La líder conservadora Angela Merkel se prepara para su investidura este miércoles en el Parlamento como canciller alemana por cuarta vez consecutiva, con la que extenderá a 16 años el Gobierno que asumió en 2005 igualando a quien fuera su mentor dentro de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Helmut Kohl.
Con una votación que se da por segura gracias a la mayoría absoluta que otorga la alianza entre conservadores y socialdemócratas, Alemania despide su mayor crisis de Gobierno al contar por fin con un Ejecutivo con plenos poderes, casi seis meses después de las elecciones generales, que los conservadores ganaron pero sin la mayoría necesaria para gobernar en solitario.
De cara a esta nueva legislatura, el presidente federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, reclamó a los líderes hacer una política más cercana a los ciudadanos. «Se trata de no ignorar temas que están en la calle», indicó en unas declaraciones publicadas hoy en el diario alemán «Rheinische Post» y pidió al nuevo Ejecutivo que analice «si los temas en los programas políticos coinciden con lo que interesa realmente a la población».
La elección de la canciller alemana dará comienzo a las 09:00 (08:00 GMT). Será el momento en el que los 709 diputados que componen en esta legislatura el Bundestag depositen su voto secreto en la urna sobre si quieren o no que la líder de la CDU siga llevando las riendas de la mayor economía de Europa otros cuatro años. Merkel necesita 355 votos. La CDU, la Unión Cristianosocial (CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD) tienen en conjunto 399 escaños.
Una vez obtenga la mayoría absoluta, la mandataria acudirá al Palacio de Bellevue para que el presidente Steinmeier la nombre canciller. Cumplimentado este trámite, Merkel regresará al Bundestag a las 12:00 para jurar el cargo. Posteriormente, será el turno de los ministros.
Con el Parlamento más fragmentado de la historia de Alemania desde que en 1953 se introdujera la cláusula del cinco por ciento de votos exigidos para contar con representación parlamentaria y el mayor de la historia del país, Merkel tuvo que afanarse para lograr formar un Gobierno de coalición, que tendrá como líder de la oposición al partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).
Nunca antes el país europeo necesitó tanto tiempo para formar Gobierno. De la incertidumbre de las primeras semanas al ver el ascenso de AfD se pasó al descontento de una opinión pública que contemplaba incrédula cómo los políticos elegidos en las urnas eran incapaces de formar un Ejecutivo.
El retraso en la formación de Gobierno se debió al intento de Merkel de forjar una inédita alianza con liberales y ecologistas, después de que los socialdemócratas, tras sufrir su peor resultado histórico desde 1949, descartaran categóricamente formar una nueva alianza y anunciaran a bombo y platillo que pasarían a la oposición.
El fracaso del primer intento para formar una alianza a finales de noviembre dejó patente un cambio interno en Alemania: atrás quedaron los años de consenso y formaciones rápidas de Gabinetes.
La pelota volvió al tejado del SPD. Finalmente, la presión social y política les empujó a sentarse a negociar con los conservadores en un intento por evitar nuevas elecciones en el país. Tras días intensos de negociaciones y después de lograr el voto a favor de los delegados y de los militantes, el SPD dio luz verde al nuevo Gobierno a principios de este mes.
La investidura tiene lugar dos días después de la firma formal del contrato de coalición de Gobierno por parte de Merkel, del líder de la CSU, Horst Seehofer, y del presidente interino del SPD, Olaf Schulz.
Comienza así la nueva andadura de Merkel, que ha logrado mantenerse en el puesto, adonde llegó por primera vez en 2005. La primera legislatura fue con el SPD, la siguiente gobernó con el Partido Liberal como socio menor y ya en su tercer mandato, que finalizó el pasado mes de septiembre, retomó el modelo inicial de sellar una coalición con los socialdemócratas. Esta alianza entre los dos principales partidos del país será la que rija ahora hasta 2021.
Por Almudena de Cabo (dpa)