(EP) – El tripulante argentino nacionalizado suizo Matías Bühler, uno de los pocos integrantes del Alinghi Red Bull Racing no nacido en Suiza, aseguró que afronta la 37ª Copa América con salida en Barcelona con la ilusión de haber cumplido un sueño y con la alegría de formar parte de un grupo que deberá «domar el toro» para conquistar la prestigiosa regata.
«Los equipos van a llegar con una preparación parecida y un factor determinante será el barco, el instrumento. El Alinghi Red Bull Racing es un toro que hay que domar, es una bestia que entender y no tenerle miedo, respeto sí. También disfrutarla, sin duda», aseguró en una entrevista a Europa Press.
Bühler, con pasado olímpico, debutará en una Copa América pero forma parte importante de un grupo de navegantes con experiencia. «No somos una banda de parados. Hay mucho talento y experiencia, y del lado de diseño e ingeniería no partimos de cero. Tenemos la suerte de tener probablemente el ‘Dream Team’ de diseñadores de barcos. Los demás equipos nos deberían envidiar», argumentó.
En este sentido, cree que los barcos de la categoría son lo más parecido a lo que es un Fórmula 1 en el mundo del motor. «Es muy parecido a la Fórmula 1, supongamos que Alonso es el mejor piloto, si no le das el mejor coche, no ganará. Se lo das a un piloto de media fila y probablemente gane. Aquí es muy parecido», valoró.
A nivel personal, no esconde que poder estar en la Copa América será un «sueño cumplido». «Fui a los últimos cuatro Juegos Olímpicos en diferentes versiones, como deportista o entrenador. Llegar a la Copa América es uno de los sueños de cualquier navegante de competición. Hace un año, cuando me confirmaron que entraba en el equipo fue sin duda un sueño cumplido», reconoció.
«La Copa América es algo con lo que había soñado. Y tenemos en el equipo de navegantes gente con mucha experiencia y con un ‘background’ de estar en desarrollo de equipos y vela olímpica, tenemos talento y experiencia de sobra para estar al nivel», manifestó al respecto.
Además, no quiere que se compare la vela olímpica con la regata transoceánica. «No creo que sea necesario compararlas, pero no tengo dudas de que en la vela hay algunas élites de la vela. Para mí saltar de una a la otra es un privilegio enorme», señaló.
BARCELONA COMO «DOBLE BONUS»
Para el navegante suizo-argentino, Barcelona es un «doble bonus» dentro de la siguiente Copa América, que el Alinghi ha ganado en dos ocasiones anteriores (2003 y 2007). «Que mi familia siga aquí y vivir la experiencia desde casa es algo único. Barcelona aporta muchas cosas, más allá de la vela, pero a nivel náutico será bonito las fechas de la Copa América en septiembre y octubre, son meses de transición», valoró el regatista, que vive en El Maresme (Barcelona).
«Barcelona le puede agregar ese toque de una gran ciudad, potente a nivel mundial, de poder dar más atracción mediática a la Copa América, más espectáculo porque pueden ir muy bien de la mano. Una ciudad tan bonita y estética, con una de las élites de la vela que si algo tiene es estética», señaló sobre qué puede aportar la capital catalana a la regata más dura y famosa del mundo de la vela.
En este sentido, cree que la ciudad podría vivir «un poco más de cara al mar y navegar más» tras el paso de la Copa América. «Ayudará a atraer la atención a los catalanes y el resto de España para las oportunidades que tiene para disfrutar de este deporte. La Copa puede ayudar a que mucha gente descubra la vela y vea de lo que se trata; los recursos están. Quizás solo falta un poco de difusión, estará ligado a cuán bien juegue las cartas la ciudad para atraer gente al mar y a la vela», manifestó Bühler, que debutará en una Copa América que pretende conquistar a bordo de un Alinghi ‘domado’.