Un total de 7.395 personas participaron en los diferentes programas de educación ambiental organizados por la Fundación Oso de Asturias (FOA) en 2016, de las que 5.473 fueron escolares, 444 profesores y el resto, adultos. Esta es la cifra más alta registrada en las actividades que convoca la entidad desde su creación en 1992, hace 25 años.
Además, 13.618 visitantes se acercaron el año pasado al Centro de Interpretación de la Casa del Oso, ubicado en Proaza, 1.336 más que en 2015.
Estos datos se han presentado durante la reunión del patronato de la FOA, presidido por primera vez por Nicanor Fernández. Durante el encuentro, al que han asistido la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, en calidad de vicepresidenta de la fundación, y el director general de Recursos Naturales, Manuel Calvo, se ha analizado la memoria de actividades de la entidad.
También se ha informado del proyecto Trabajando el bienestar de los osos pardos cautivos, diseñado por la FOA y seleccionado por la Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. La FOA recibirá este año una subvención de 13.870 euros para impulsar esta iniciativa, que tiene como finalidad el enriquecimiento ambiental de los cercados, la instalación de cámaras de seguridad y el seguimiento etológico de los animales, así como el desarrollo de cursos de formación e intercambios con otros centros.
Actividades para escolares
Por otra parte, el programa de educación ambiental Valles del Oso, que la FOA ha adelantado este año al mes de marzo debido al gran número de solicitudes presentadas, contará con más 800 escolares y con la novedad de la participación de un colegio de Ciudad Real. Esta es la primera ocasión en que estudiantes de fuera de Asturias asisten a actividades de la entidad. El programa persigue formar al alumnado en actitudes positivas hacia el medio ambiente y el respeto y cuidado del medio ambiente.