El Gobierno del Principado ha invertido desde 2012 hasta ahora 11,4 millones en infraestructuras vinculadas a concentraciones parcelarias forestales y agrarias, que se complementan con mejoras de accesos a las fincas y núcleos rurales afectados. Estos datos han sido facilitados hoy por la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, durante la entrega de los títulos de propiedad a 66 dueños de fincas de la concentración de Lourido y Piñeiro, en el concejo de Taramundi, que ha supuesto una inversión de 1.116.569 euros y en la que se actuado sobre una superficie total de 315 hectáreas.
Álvarez ha asegurado que esta inversión demuestra el esfuerzo del Ejecutivo autonómico para ampliar la superficie de las explotaciones, “tan importante para su rentabilidad”. Según la consejera, la política de concentraciones parcelarias debe continuar, porque el tamaño de las explotaciones es clave para su competitividad. “No se puede competir cuando el terrazgo es pequeño, está fragmentado y no tiene forma de acceder a él en tractor”, ha señalado.
En la entrega de títulos realizada hoy los propietarios aportaron 889 parcelas que han quedado transformadas en 130 nuevas fincas. La actuación se ha complementado con obras de mejora de 16,7 kilómetros de caminos para el acceso a los núcleos afectados y a las explotaciones, dotándolos de la anchura adecuada para el tránsito de vehículos agrícolas y forestales.
La consejería está elaborando otros tres proyectos de concentraciones parcelarias en Taramundi que afectarán a 657 hectáreas. Concretamente, a la zona de Freixe, Santa Marina-Folgueirosa (donde está previsto iniciar las obras este año) y el monte de Loutima, de carácter privado.
Con esta actuación, el Gobierno de Asturias ya ha desarrollado diez concentraciones parcelarias en Taramundi, que han afectado a 2.488 hectáreas. La más antigua es la de Ouría, en el año 1986, y la más grande en superficie la de Teijo, con 690 hectáreas, entregada en 1995. Asimismo, se han desarrollado concentraciones que afectaron a los montes privados como la de Leiras, en 2013, y Cabaza, en 2014.