Madrid mira al futuro y la Oficina del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (Pgoum) ha comenzado el proceso de consulta entre los ciudadanos para el diseño de la capital del futuro en sus 21 distritos.
La oficina trabaja en el análisis de situación de la ciudad; en paralelo, ahora aborda una importante consulta vecinal para conocer cuál es su impresión sobre los barrios y los distritos donde viven: qué carencias perciben, qué necesidades tienen y cómo quieren que sea su entorno a medio y largo plazo.
Con esta información, la oficina se desplazará a cada distrito para trasladar los datos relacionados con vivienda, demografía, ocio, dotaciones y empleo, entre otras cuestiones, con el fin de recabar las propuestas de los ciudadanos y, más adelante, darles respuesta ofreciéndoles soluciones.
Desde este mes, la oficina realizará encuestas personales y telefónicas a los residentes de los 21 distritos para obtener un análisis preliminar de la realidad que se percibe en cada uno de ellos.
PROYECTO DE CONSENSO
Con la participación, tanto pública como privada, se persigue impulsar un proyecto con alto grado de consenso que deberá fomentar la información, divulgación e intercambio de reflexiones entre todos los actores implicados, estableciendo los cimientos para el nuevo Plan General de Ordenación Urbana.
A través de la oficina, cuya sede se ha instalado en el número 5 de la plaza de la Villa bajo el lema ‘Sueña Madrid’, el Ayuntamiento se propone diseñar la ciudad de Madrid para las próximas generaciones, garantizando también la seguridad jurídica en materia de planeamiento urbano, respetando la calidad de vida de los ciudadanos y atrayendo inversión y empleo.
LOS RETOS DEL NUEVO PGOUM
El Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, que dirige Borja Carabante, se ha fijado como reto lograr la construcción de nuevos hogares a precio asequible para que los ciudadanos puedan vivir en la capital de España y, a su vez, atraer talento.
Por otra parte, también busca la transformación de la ciudad para generar un nuevo espacio público más amigable y más verde. A ello se une el objetivo de la sostenibilidad ambiental, como un factor esencial de la planificación urbanística, unida a la sostenibilidad económica y social.
Todo ello, con la premisa de mantener como máxima prioridad la protección del patrimonio, y el respeto al conjunto de bienes protegidos de la ciudad.