Berlín, 12 jun (dpa) – La madre de Roman Protasevich, bloguero encarcelado en Bielorrusia por sus críticas al Gobierno, pidió a la canciller alemana, Angela Merkel, que ayude a conseguir la liberación de su hijo y de otros presos del país.
«Le pedimos encarecidamente que nos ayude para que todos los inocentes sean liberados de la cárcel», dijo Natalia Protasevich en declaraciones publicadas hoy por el diario alemán «Bild».
«Necesitan ayuda urgente porque están expuestos al sadismo y la violencia todos los días», añadió.
Protasevich pidió además que se haga frente al presidente bielorruso, Alexander Lukaschenko, que se enfrenta a protestas desde las controvertidas elecciones del año pasado.
«Cada día, no, cada hora que pasa cuesta la vida a personas inocentes, incluidos niños», indicó Protasevich.
Hace casi tres semanas, las autoridades bielorrusas obligaron a hacer escala en Minsk a un avión de pasajeros de Ryanair que iba de Atenas a Vilna y detuvieron al crítico del gobierno Roman Protasevich y a su novia, Sofia Sapega, que iban a bordo.
La Unión Europea (UE) impuso sanciones a la antigua república soviética por ello.
El padre del bloguero, Dmitri Protasevich, señaló a «Bild» que las cartas que envía no son entregadas a su hijo. «Ni siquiera su abogada puede hablar con nosotros libremente por teléfono (..) en cambio, el Estado ya ha publicado dos vídeos en los que (Roman Protasevich) hace confesiones forzadas».
Añadió que en las imágenes se puede apreciar en el rostro de su hijo claros signos de tortura como la nariz torcida, por lo que cree que posiblemente se la habrían roto.
Agregó que otra señal de tortura son los moratones que se ven en el cuello de su hijo. «Una experta nos dijo que eran marcas de estrangulamiento», comentó.
Los padres de Protasevich viven exiliados en Polonia.
El 10 de junio el Parlamento Europeo adoptó nuevas medidas de presión contra Bielorrusia, que también se aplican a la agricultura y a otros sectores industriales.
Desde el 5 de junio las compañías aéreas bielorrusas no han vuelto a entrar en el espacio aéreo de la UE por prohibición expresa de los Estados del bloque.