El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, ha señalado este martes que «no es garantía de éxito» el haber sido exjugador de un club a la hora de tomar los mandos del equipo desde el banquillo, algo que sí le ha sucedido a él u ocurrió previamente con Pep Guardiola en el Barça, en referencia a la llegada de Zinedine Zidane al cargo del eterno rival, el Real Madrid, tras la destitución de Rafa Benítez.
«Hay muchas ventajas que tenemos los que hemos sido exjugadores a la hora de entrenar, pero tiene el crédito que tiene. Todo pasa por las ideas que tengas como entrenador, hay muchos conceptos que son muy diferentes de jugador a entrenador. Hay decisiones que tendrás que tomar de manera colectiva. No es garantía de éxito ni haber sido exjugador ni no haberlo sido», señaló en rueda de prensa.
No opinó sobre este relevo ni sobre las cualidades de Zidane como técnico. «No conozco al Zidane entrenador, no puedo valorarlo. No he coincidido (de nuevo) con él, pero no tengo mal recuerdo de ningún jugador con quien me haya enfrentado. Cada no defiende su intereses, no tengo recuerdos ni en positivo ni en negativo», matizó pese a un encontronazo entre ambos cuando eran jugadores.
«Sorprenderme no porque es un tema que ya es habitual en el fútbol moderno», comentó sobre el despido de Benítez apenas siete meses después de haber aceptado el cargo. «Sabemos que la cadena siempre se rompe por el eslabón más corto y por suerte o por desgracia es el entrenador», señaló.
En este sentido, recalcó que lo primero que les dicen en el curso de entrenadores es que se enfrentan a ser despedidos. «Todos los entrenadores en algún momento son destituidos. Es una noticia desagradable cuando somos los cesados y es positiva cuando entras y aceptas el reto. Lo asumimos», relativizó.
Por otro lado, destacó el buen momento del Atlético de Madrid, nuevo líder de la Liga BBVA tras el empate del Barça ante el Espanyol aunque los blaugranas tienen un partido todavía por disputar. «Nunca he descartado al Atlético. Cada año se refuerzan bien, han hecho un muy buen mercado y sigue siendo un equipo temible», se sinceró.