Una flota empresarial es imprescindible en muchas compañías, pero lo cierto es que es un gasto muy importante y por eso hay que gestionarla lo mejor posible para que no suponga un desembolso demasiado alto.
La tecnología ayuda a esto con soluciones como las que nos ofrece eccocar.com, que nos asiste para tener el número justo de vehículos y a que no estén infrautilizados, mezclando el uso del taxi con la flota propia e incluso compartiendo flotas entre varias empresas.
Comprar coches con un consumo menor
Dentro de los vehículos que se pueden adquirir o alquilar siempre hay que buscar los que tengan el menor consumo posible, pues se ha calculado que esta partida supone una quinta parte del gasto del mantenimiento de la flota.
Tal vez no sea una buena idea comprar esos SUV enormes con una aerodinámica nula, y es mejor decantarnos por berlinas tradicionales, con mejor coeficiente aerodinámico y un menor peso que se traducen en un gasto de combustible bastante más bajo.
Compartir flotas
Muchos automóviles de flotas pasan la mitad del día parados sin que nadie los aproveche y generando gastos.
Esto puede cambiar gracias a la tecnología, que en muchos casos permite que varias empresas compartan vehículos de una misma flota, autorizando que los empleados de distintas compañías accedan a los automóviles mediante NFC sin necesidad de llaves.
Uno de los ejemplos más claros lo podemos ver en aquellas empresas que tienen muchos coches parados a la espera de que alguien los use, que podrían compartir con los empleados de otra compañía que los necesite en ese momento, o los vehículos que quedan aparcados toda la tarde porque solo hay turno de mañana.
Formar a los conductores
Podemos comprar coches que consuman poco y de calidad, pero al final el resultado que nos dé un vehículo depende mucho de la persona que lo conduce, de cómo lo trate.
Debemos formar a los conductores en mecánica básica y conducción eficiente, aunque una buena manera de evitarnos problemas es adquirir la flota mediante renting, para que no nos afecten las averías que provoca la conducción poco cuidadosa.
Tener rutas establecidas de antemano
Tener unas rutas estudiando que sean cortas y eficientes puede no ser muy importante para los turismos, pero cuando hablamos de flotas de furgonetas con carga o camiones esto cambia.
Hay que hacer las rutas antes de que los vehículos pesados salgan teniendo en cuenta el gasto de combustible, pero preguntando a los conductores por si hay alguna zona que quieren evitar por cualquier razón, como que sea peligrosa, estrecha, etc.
Monitorizar los vehículos
Ahora es muy fácil monitorizar los vehículos con GPS y volcar los datos a una app o a un software de gestión de flotas, que se encargará de mostrarnos un análisis global.
Con este estudio veremos cuántos km hacen nuestros coches, dónde están en todo momento, si siguen las rutas establecidas e incluso podemos ayudar a algún empleado que se pierda o tenga un problema de salud repentino, además de situar el coche en un lugar exacto si hay que mandar una grúa.