Coblenza (Alemania), 21 ene (dpa) – Los líderes de la ultraderecha europea, reunidos en la ciudad de Coblenza, en el oeste de Alemania, mostraron hoy confianza de cara a las citas electorales que se celebrarán este año en el Viejo Continente y pronosticaron «el fin de una era».
«El auge de la derecha europea supone una respuesta de los ciudadanos al dictado de las élites liberales. Vivimos el fin de una era y el nacimiento de una nueva», declaró la candidata a la presidencia de Francia y líder del partido ultraderechista Frente Nacional (FN), Marine Le Pen.
«La canciller alemana (Angela Merkel) se presenta en los medios franceses como una heroína humanitaria por haber acogido a los refugiados, pero no se les pregunta a los alemanes qué piensan de esta política migratoria», agregó Le Pen.
Tras la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea (UE) y de la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, Le Pen señaló que 2017 será «el año del despertar de los pueblos de Europa central».
La candidata del Frente Nacional a las elecciones francesas fue la primera política de la ultraderecha europea en tomar la palabra ante un millar de simpatizantes que también aplaudió las consignas contra Merkel pronunciadas por el líder populista de derechas del Partido por la Libertad (PVV) holandés, Geert Wilders.
El estrado secundó asimismo el discurso pronunciado por la copresidenta del partido populista de derechas Alternativa para Alemania (AfD), Frauke Petry, quien acusó al Gobierno alemán y a las instituciones europeas de someter a la ciudadanía a un «lavado de cerebro».
«También este tipo de manipulación amenaza la libertad del individuo y los logros culturales de los países europeos. El lavado de cerebro que se practica en la actualidad es mucho más inteligente que la antigua propaganda socialista», añadió.
En un acto concebido como el inicio de la campaña electoral de cara a elecciones generales que este año tendrán lugar en Francia, Alemania y Holanda, la plana mayor de la ultraderecha europea dio muestra de la buena sintonía existente entre ellos y no dudó en calificar a Donald Trump como el ejemplo a seguir.
«Trump ha indicado la salida de un callejón sin salida y eso mismo es lo que queremos hacer nosotros en Europa», declaró la líder AfD.
«El tiempo en el que los nacionalistas en Europa eran grupos marginales se ha terminado. En esta nueva etapa se trata de lograr mayorías en las urnas», insistió, por su parte Le Pen.
Los partidos populistas de derecha y de extrema derecha que hoy se dieron cita en Alemania forman parte del grupo político Europa de las Naciones y de la Libertad (ENF en sus siglas en inglés), una de las fracciones del Parlamento Europeo.
Es el menos numeroso de la Cámara comunitaria, pero uno de los que más ruido hace con propuestas que contradicen los pilares básicos europeos, tales como abogar por la salida de la Unión.
De forma paralela a la celebración de la cumbre de la ultraderecha, unas 5.000 personas salieron a la calle para mostrar su disconformidad con el evento y secundar protestas a favor de una Europa abierta y alejada de una política nacionalista, racista y que fomente el odio.
Los manifestantes cantaron la versión alemana del «Himno de la Alegría» que fue interpretada por miembros de la Filarmónica del Rin frente al edificio en el que permanecían reunidos los líderes populistas y de extrema derecha.
Entre los participantes en las movilizaciones se encontraban también destacados políticos alemanes y europeos, entre ellos, el líder del partido socialdemócrata germano (SPD), Sigmar Gabriel, o el ministro de Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn.
«Estamos a favor de una Europa llena de color, abierta y social, de una Europa del siglo XXI», señaló Asselborn.
Por Anne-Béatrice Clasmann y María Prieto