Wiesbaden (Alemania), 9 jun (dpa) – Las exportaciones alemanas se estancaron en abril ante la caída de la demanda de China y de las principales economías emergentes, al tiempo que se contrajeron las importaciones para completar un panorama menos alentador sobre la mayor economía de Europa al comienzo del segundo trimestre del año.
Las ventas de productos germanos al exterior, uno de los pilares de la mayor economía de Europa, se mantuvieron invariables en abril respecto de marzo, cuando registraron un sólido incremento de 1,9 por ciento tras un aumento de 1,4 por ciento en febrero, señalan las cifras divulgadas hoy por la Oficina Federal de Estadísticas (Destatis).
Aún así, los números de abril fueron mejores que los esperados por los analistas bancarios, que habían pronosticado una caída de 0,8 por ciento.
Las importaciones cedieron un 0,2 por ciento y encandenaron la segunda caída consecutiva tras una contracción de 2,3 por ciento en marzo. Los analistas esperaban en abril un avance de 1,3 por ciento.
Respecto a abril de 2015, las exportaciones aumentaron un 3,8 por ciento, mientras que las importaciones se mantuvieron casi invariables.
El comercio exterior con países de fuera de la Unión Europea se debilitó al tiempo que mejoraron los negocios con socios de la Unión Europea y de la zona euro.
Muchos economistas pronostican que la economía alemana perderá ritmo en los próximos meses después de expandirse en el primer trimestre del año en un 0,7 por ciento comparado con el último trimestre de 2015, cuando creció un 0,3 por ciento.
«Mientras que seguimos siendo optimistas respecto al mercado laboral, creemos que el impulso proveniente de los precios bajos del petróleo en los ingresos reales está perdiendo intensidad», señaló el Deutsche Bank en un informe mensual remitido a sus clientes.