Cuando la actual revolución tecnológica está transformando todos los sectores de negocio, el sector legal -tradicional y conservador- experimenta un buen número de cambios.
Las reglas del juego cambian. Ya no vale con proporcionar asesoramiento personalizado a los clientes. Ahora es necesario atraer, ofrecer las últimas herramientas y conocimientos digitales, y estar a disposición de cada cliente en cualquier lugar y momento. Términos como internacionalización, deslocalización o trabajo colaborativo ocupan, de manera paulatina, un lugar destacado entre los profesionales jurídicos.
Como explica Mercedes Caral, socia de Fieldfisher Jausas y presidenta de la American Bar Association (ABA) en España, en la nueva edición de Conversaciones en la Azotea de Lefebvre sobre Nuevos perfiles jurídicos derivados de la innovación, dado que “el mundo es más global, el abogado necesita ser más internacional”. A su criterio, “pertenecer a una asociación internacional favorece el acceso a cualquier abogado de otros países”, ampliándose así la cartera de contactos.
En este sentido, Luis Guerra, socio fundador y director general de Vasalto Tech and Talent, apunta que “la internacionalización es una gran oportunidad, porque permite crecer con nuestros clientes”.
¿Existe riesgo en la uberización del sector legal?
Una de las cuestiones más actuales es la del trabajo colaborativo y su generalización en un futuro cercano mediante nuevos modelos como la uberización. Si entendemos por uberización el trabajo que realizan diferentes plataformas de economía colaborativa en las que, gracias a internet y las nuevas tecnologías, se ponen a disposición de particulares, sin intermediarios, diversos bienes y servicios, la pregunta que se plantea es saber qué riesgos existen en la uberización del sector legal.
Según Mercedes Caral, “se puede uberizar el derecho en cuestiones básicas sencillas que permiten ser estandarizadas. Sin embargo, las cuestiones más complejas requieren una mayor especialización”. A este respecto, Luis Guerra insiste en la necesidad de avanzar al ritmo de la innovación. “Necesitamos cambiar hacia esa cultura colaborativa, no hay que tener miedo a los riesgos. Tenemos delante una gran oportunidad”, asegura el experto.
Trascendencia de la tecnología para el sector legal
La trascendencia de la tecnología ha facilitado la internacionalización y el crecimiento del sector legal, “gracias a nuestro ADN tecnológico” según el socio fundador y director general de Vasalto Tech and Talent, quien defiende la influencia que tiene la tecnología sobre el éxito de un despacho de abogados. Sin embargo, para garantizar la eficiencia del despacho, debe darse una combinación clave con un “uso adecuado de la tecnología y el cuidado del talento de las personas”, concluye Luis Guerra.
Mercedes Caral comparte esta idea subrayando que el abogado tiene que seguir a la sociedad, porque todo es “una oportunidad de crecimiento y esta digitalización del sector ayuda a seguir adelante”.
Esta última edición de Conversaciones en la Azotea ha tratado sobre los nuevos modelos de negocio surgidos en el sector jurídico con las nuevas tecnologías. Para ambos expertos resulta imprescindible que la industria legal avance al ritmo de la innovación tecnológica, pero sin olvidarse nunca de las personas, las auténticas protagonistas de este cambio.