Berlín, 25 may (dpa) – La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) abogaron hoy en Berlín por acometer reformas que faciliten a los refugiados el acceso al mercado laboral.
«Muchos de los migrantes que en los últimos años han llegado a Alemania están ahora buscando un trabajo o formación», señaló hoy el representante de ACNUR en Alemania, Dominik Bartsch, durante la presentación de una investigación internacional en la capital alemana.
«La mayoría de las empresas que hasta ahora ha contratado a migrantes lo ha hecho por una cuestión de responsabilidad social», apuntó por su parte Thomas Liebig, de la OCDE.
«Debe, no obstante, quedar claro que la contratación de migrantes merece la pena también desde el punto de vista económico. Muchas empresas tuvieron buenas experiencias en este sentido porque los migrantes son percibidos como trabajadores especialmente motivados», agregó.
En el estudio presentado hoy en Berlín, la OCDE y ACNUR analizaron las condiciones de trabajo de los refugiados en Europa, Estados Unidos y en Canadá, en base a entrevistas a más de 150 empleadores así como a numerosos refugiados, organismos públicos y asociaciones.
Alemania recibió durante la crisis migratoria de 2015 a cerca de un millón de refugiados. La integración de esta gran cantidad de peticionarios de asilo constituye el principal desafío al que la potencia europea debe hacer frente en la actualidad.
La intensa burocracia que caracteriza a la administración alemana dificulta un rápido acceso de los refugiados, por ejemplo, al mercado laboral. La convalidación de títulos o documentos emitidos en sus países de origen demora habitualmente los procesos, de forma que hay refugiados que desde hace más de dos años esperan en Alemania a que su situación se legalice y mientras, como no pueden trabajar, viven de las ayudas del Estado.