Londres, 27 ene (dpa) – Si bien la Copa de la Liga es un torneo menor en Inglaterra, la decepción de Jürgen Klopp por haber dejado pasar la oportunidad de llegar a la final es grande.
Es por eso que la prensa británica comienza a augurar tiempos difíciles para el entrenador del Liverpool después de la caída en casa por 1-0 ante el Southampton que dejó a los «reds» sin la posibilidad de sumar el primer título bajo el mandato del técnico alemán. Además, la derrota llegó en medio de una semana decisiva, con un partido de la Copa inglesa y el cruce ante el Chelsea en la Premier.
«Si Klopp no experimentó ya su primera crisis en Anfield, entonces ésta es inminente», escribió el tabloide «The Sun». «Klopp necesita con urgencia encontrar respuestas porque el Liverpool pierde el ritmo», afirmó por su parte el diario «The Guardian», que además hizo hincapié en que el equipo apenas ganó uno de los siete partidos que disputó en 2017 y que apenas fue un 1-0 ante el Plymouth Argyle, de la cuarta división, en la revancha de la tercera ronda de la Copa de Inglaterra.
El diario «Liverpool Echo» ya expresó su preocupación de que el equipo pierda rendimiento y recordó lo que ya le sucedió a finales de la temporada pasada, cuando bajó su producción después de perder 3-1 ante el Sevilla en la final de la Liga Europa.
El periódico citó al técnico y preparador físico holandés Raymond Verheijen, un duro crítico de los métodos de entrenamiento de diferentes equipos. Verheijen, colaborador de su compatriota Guus Hiddink en las selecciones de Corea del Sur y Rusia, ya había advertido en septiembre de 2016 que el Liverpool podía entrar en crisis, debido a sus «intensivos entrenamientos y el estilo de juego».
«Es muy probable que los jugadores lleguen agotados a los últimos meses de la temporada», vaticinó el preparador holandés.
Sin embargo, para el ex técnico del Borussia Dortmund ni el sistema de juego ofensivo ni la intensidad de los entrenamientos entran en discusión. En su cuenta de Twitter, el Liverpool sintetizó el pensamiento del entrenador.
«Es una gran decepción, podríamos haber ganado», afirmó el alemán. «Si ahora dudamos de la forma en la que estamos por estos pequeños problemas, sería realmente una cosa extraña. Sabemos lo que queremos hacer y sabemos lo que tenemos que hacer», remarcó Klopp.
El sábado, el Liverpool tiene un compromiso en la teoría sencillo por la Copa inglesa ante el Wolverhampton Wanderers, que marcha décimo octavo en la segunda división.
Por eso, el gran desafío es el enfrentamiento del martes en Anfield ante el Chelsea, líder de la Premier. Con una victoria, el Liverpool podrá reengancharse en la lucha por el título, pero una eventual derrota lo podría dejar a 13 puntos de la cima.
Ante esa situación, el Liverpool de Klopp está ante una semana decisiva en la que necesita dos victoria para seguir con la ilusión de levantar un título al final de la temporada.
Por Philip Dethlefs