Wangerooge (Alemania), 7 feb (dpa) – La pequeña isla alemana de Wangerooge, en el mar del Norte, busca un nuevo encargado para su viejo faro, un empleo para el cual no hay que tener miedo a las alturas y se debe conocer de mareas y navegación.
Según el anuncio de empleo de la comuna, los candidatos también deben estar en buena forma física. «Hay que ser capaz de recorrer los 161 escalones al menos dos veces al día», explicó a dpa Rieka Beewen, representante del alcalde en Wangerooge, sobre la necesidad de abrir y cerrar el faro.
«Y en caso de duda, hay que volver a subir una tercera vez», añadió.
El faro rojo, blanco y negro, de 39 metros de altura, es uno de los símbolos de esta isla en la región alemana de Frisia Oriental.
Los aspirantes al puesto laboral, además, no necesitan estar familiarizados con la tecnología de iluminación, ya que el viejo faro no funciona desde 1969. El antiguo faro se utiliza como mirador desde 1972. En la planta baja se encuentra también el museo de la isla.
Según la descripción del puesto, las funciones del farero incluyen, por ejemplo, la venta de entradas, el control de admisión, el mantenimiento de las zonas verdes del faro y la venta de artículos de recuerdo.
«Las habilidades manuales serían una ventaja, porque siempre hay algo de trabajo que hacer en un edificio tan antiguo», señaló Beewen, directora del balneario.
El futuro encargado del faro no podrá vivir en el edificio, bajo protección como monumento histórico.
«El faro no tiene espacio suficiente para ello», explicó Beewen. En todas las islas de Frisia Oriental escasea el espacio para vivir. Sin embargo, la funcionaria anticipó que el municipio ayudará a encontrar alojamiento.