Fráncfort, 19 oct (dpa) – La inauguración oficial de la Feria del Libro de Fráncfort, la cita cumbre del mundo editorial que ha arrancado este martes en la ciudad del Meno, ha dejado para los anales de la historia un momento inédito.
En tiempos convulsos que animan al descrédito y en un evento presenciado principalmente por intelectuales, el orador más aplaudido ha sido un político.
El presidente del Parlamento Europeo, el alemán Martin Schulz, cosechó una cerrada ovación tras pronunciar un discurso crítico con el dirigente turco Recep Tayyip Erdogan y los partidos populistas que han irrumpido en el tablero político global.
«Se comentó anteriormente que los políticos se callan, eso a mí no se me puede aplicar. Quien amenaza la libertad de expresión no puede decir que es un demócrata. En este sentido, desde aquí quiero mostrar mi solidaridad total con la escritora Asli Erdogan y con todos los periodistas que están en la cárcel en Turquía y también hacer un llamamiento al Gobierno de ese país: liberen a esta gente», dijo Schulz nada más tomar la palabra.
El socialdemócrata recogió el guante lanzado por su predecesor en el pódium, el jefe de la asociación de librerías alemanas, Heinrich Riethmüller, quien leyó una carta escrita por la autora turca detenida y acusó a la clase política de no velar por los derechos humanos en el país del Bósforo en aras de no perjudicar el tratado de refugiados firmado entre Ankara y Bruselas.
«Mientras nosotros festejamos la Feria del Libro, hay compañeros entre rejas. Asli Erdogan estuvo hace ocho años aquí, cuando Turquía fue el país invitado. Ahora comparte celda con otras 21 mujeres. La cultura y el periodismo se persiguen de forma masiva en Turquía, incluso se cierran editoriales infantiles», recalcó Riethmüller.
En un acto presidido por los reyes Guillermo de Holanda y Felipe de Bélgica (Holanda y la región de Flandes son los invitados de honor), tampoco faltaron alusiones a los peligros que amenazan el corazón de Europa.
«Los populismos dividen conscientemente a la sociedad y azuzan a unos contra otros. En Alemania arden iglesias, los policías son agredidos, los políticos, incluso el presidente del país recibe insultos y los populistas para cada problema presentan una cabeza de turco pero nunca una solución. Por eso apelo aquí en la feria, en un lugar repleto de intelectuales, a que nos movilicemos y hagamos frente a esta gente», subrayó el presidente del Parlamento Europeo.
A pesar de protagonizar una intervención de marcado carácter político, Martin Schulz se quitó en determinados momentos el traje de eurodiputado para salpicar su discurso con referencias literarias y elementos biográficos que dejaron al descubierto la pasión que siente por la lectura y que le llevó a ejercer de joven la profesion de librero.
La Feria del Libro de Fráncfort constituye el mayor escaparate literario del mundo. En él se darán cita hasta el domingo más de 7.000 expositores de cerca de 100 países del mundo. En torno al evento están previstos unos 4.000 actos culturales y la presencia de unos 600 escritores. En total, los organizadores esperan recibir 300.000 visitantes.
En su 68 edición, Holanda y la región belga de Flandes son los invitados de honor. Comparten una misma lengua, el neerlandés, y un espacio cultural. «Esto es lo que compartimos» es el lema con el que dan la bienvenida, un mensaje que apuesta por la colaboración y los puntos en común y sirve para desdibujar fronteras en un tiempo en el que lo ajeno se mira con escepticismo y los nacionalismos recobran fuerza.
Por María Prieto