La escudería Renault ha escenificado este miércoles su retorno a la Fórmula 1 con la presentación de sus nuevos pilotos, Kevin Magnussen y Jolyon Palmer, y su nuevo coche, un monoplaza de color casi exclusivamente negro con algunos toques de amarillo, con el que se plantean el objetivo de «lograr podios en tres años», todo bajo la dirección técnica de Bob Bell, que retorna a la marca del rombo tras su papel protagonista en la época gloriosa con Fernando Alonso.
El presidente de Renault, Carlos Goshn, explicó este miércoles la nueva estructura de competición de la casa francesa durante un multitudinario evento con prensa internacional celebrado en su Technocentro de Guyancourt (Francia), donde se presentó la nueva imagen de Renault en su retorno a la Fórmula 1 tras formalizar la compra de Lotus. «El objetivo es estar en el podio en tres años», anunció.
Ghosn destacó el «programa exhaustivo» que Renault ha puesto en marcha con este nuevo proyecto. «La Fórmula 1 se encuentra en el centro de nuestros esfuerzos con el objetivo de aumentar la notoriedad de Renault, especialmente en aquellos territorios en los que la marca está dando sus primeros pasos», explicó.
2011 fue el último año de Renault como escudería propia, por lo que este nuevo proyecto cierra una etapa de cuatro años en la que Lotus ha ostentado la propiedad. La última temporada, los pilotos fueron Romain Grosjean y Pastor Maldonado y Lotus finalizó sexto entre los diez equipos que disputaron el Mundial de Constructores.
El nuevo equipo de F1, oficialmente denominado Renault Sport Formula One, se integrará en una de las dos divisiones del grupo, Renault Sport Racing, que también agrupa Renault e.dams -el equipo de Fórmula E eléctrica-, Fórmula Renault 2.0 y Renault Sport R.S. 01 Trohy, así como otros programas de competición en circuito y en rally. La otra, llamada Renault Sports Car, se encargará de la comercialización de vehículos deportivos con el distintivo Renault Sport.
Renault Sport Racing estará presidido por Jerome Stoll y el director general será Cyril Abiteboul. El núcleo de esta división es el equipo de Fórmula 1, que llevará el chasis R.S.16 desarrollado y ensamblado en Enstone (Inglaterra) y el grupo propulsor R.E.16 que se seguirá desarrollando en Viry-Chatillon (Francia).
El director técnico de la escudería será Bob Bell, que retorna tras su papel protagonista en los títulos mundiales conquistados por Fernando Alonso en 2005 y 2006, y que tendrá bajo su responsabilidad a Nick Chester (directór técnico de chasis) y Remi Taffin (director técnico de motor), mientras que el ‘español’ Gerard López seguirá siendo director no ejecutivo.
Además, también se anunció la Renault Sports Academy, con la que la casa francesa persigue un doble objetivo: detectar a los jóvenes talentos que algún día podrían llegar a la Fórmula 1 y dar a los distintos mercados de Renault la oportunidad de jugar un papel activo en el rendimiento deportivo futuro a través de la promoción y el apoyo a sus pilotos locales.