Berlín, 26 mar (dpa) – Las tecnologías digitales pueden contribuir a cumplir hasta una cuarta parte de los objetivos climáticos de Alemania para 2030, según un estudio de la consultora Accenture, dado a conocer hoy por la asociación digital Bitkom.
«La digitalización puede contribuir en casi una cuarta parte a los objetivos climáticos fijados por Alemania para 2030», afirmó la vicepresidenta de Bitkom, Christina Raab.
El estudio prevé dos escenarios: una digitalización estándar y una digitalización acelerada, que se basa en empresas y países líderes en el uso de una o varias tecnologías. En el escenario estándar, los autores suponen que la penetración de las tecnologías digitales en el mercado continuará como hasta ahora o según lo previsto hasta 2030.
Sin embargo, si se acelera la digitalización, las emisiones anuales de CO2 podrían reducirse en unos 73 millones de toneladas de aquí a 2030, según el estudio. Si la digitalización continúa al ritmo actual, el efecto de ahorro será significativamente menor. En este escenario, en 2030 podrían ahorrarse unos 50 millones de toneladas de CO2, lo que corresponde al 16 por ciento del objetivo.
El estudio identifica el mayor potencial de ahorro de CO2 mediante tecnologías digitales en el sector energético. En este caso, podrían ahorrarse hasta 26,4 millones de toneladas de CO2 con la digitalización acelerada o 24,5 millones de toneladas de CO2 con la digitalización estándar.
El estudio sitúa al sector de la construcción en segundo lugar. Señala que las tecnologías digitales podrían regular automáticamente los radiadores cuando se abre una ventana o controlar el aire acondicionado en función de las condiciones meteorológicas y el número de personas presentes.
Así, en el escenario estándar, podrían ahorrarse unos 12,4 millones de toneladas de dióxido de carbono y hasta 18,3 millones de toneladas si se acelera el avance en la implementación de tecnologías inteligentes en el sector de la construcción.
De acuerdo con el estudio, la digitalización acelerada permitiría ahorrar hasta 12,7 millones de toneladas de CO2 en la producción industrial. En el transporte, permitiría reducir hasta 9,3 millones de toneladas de CO2, frente a los 3,5 millones de toneladas con una digitalización estándar.