El programa bilingüe cuenta ya con una implantación de cerca del 50% en la red educativa asturiana. Así lo ha señalado hoy el consejero de Educación y Cultura, Genaro Alonso, durante la presentación de los resultados del primer informe sobre esta iniciativa, que ha elaborado su departamento con una participación de 109 centros con 388 aulas bilingües.
Alonso, cuyo objetivo es seguir potenciando el bilingüismo en la escuela asturiana, ha señalado que en el curso 2014-2015 este modelo contaba con 31.101 estudiantes, algo más del 40% del alumnado de Secundaria, con más presencia de mujeres.
La Consejería de Educación y Cultura ha realizado cuatro estudios independientes para valorar los resultados del proyecto y ha concluido que en el 75% de los casos estas enseñanzas corren a cargo de profesorado estable o definitivo, y en el 80% forman claramente parte del proyecto educativo del centro.
El consejero ha subrayado que una de las principales conclusiones que se extraen del informe es que el aprendizaje de las materias no lingüísticas no se resiente y existe, además, un alto grado de satisfacción entre las familias.
Los datos reflejan que en los seis cursos de Educación Primaria se observa un ligera ventaja en las tasas de promoción a favor del alumnado del programa bilingüe (de entre el 0,7% y el 2,1%). En Secundaria, los estudiantes presentan una tasa de éxito un 11,5% superior a la del alumnado no bilingüe.
Además, los estudiantes del programa bilingüe lograron mejores resultados en la evaluación de diagnóstico de 2013 en la competencia matemática, conocimiento e interacción con el mundo físico y lingüística, inglés.
Cabe recordar que el Programa Bilingüe es una iniciativa que comienza en Asturias en el año 2004 de forma experimental y que a partir del año 2008 se consolida y expande por la red de centros.
Los centros docentes que participan en el proyecto establecen, en los diferentes cursos de las etapas educativas, una serie de materias en las que el proceso de enseñanza-aprendizaje se desarrolla en lengua extranjera. Es lo que se conoce como metodología AICLE: Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas Extranjeras, de modo que se logra una mejora de la competencia en la lengua extranjera a la vez que se abordan los contenidos de otras materias no lingüísticas.