(EP) – Los embajadores en Haití de varios países, entre ellos lo de España, Estados Unidos y la Unión Europea, han respaldado los esfuerzos liderados por el primer ministro haitiano, Ariel Henry, en favor de un Gobierno «inclusivo», aunque han instado a «acelerar» los trabajos para que pueda haber una mínima estabilidad institucional.
El vacío de poder en el país caribeño se agravó con el asesinato el 7 de julio del presidente, Jovenel Moise. Henry asumió de forma provisional las riendas del Gobierno y, por extensión del país, y ahora está bajo presión por las acusaciones de un fiscal contra él y la dimisión de varios miembros del Ejecutivo.
El Core Group, que agrupa a los embajadores de España, Alemania, Brasil, Estados Unidos, Francia, la UE, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la ONU, ha publicado un comunicado para respaldar la búsqueda de un «acuerdo consensuado», teniendo en cuenta que el objetivo sigue siendo un «funcionamiento normal de las instituciones democráticas» que pasa por la convocatoria de nuevas elecciones.
En este sentido, confían en que pueda haber un «diálogo constructivo» fundamentado en «los principios de la democracia», con el objetivo de «preservar la cohesión nacional y permitir al país retomar su camino hacia la estabilidad política». Moise ya gobernaba por decreto desde enero de 2020 por la falta de Parlamento.
Los países firmantes también han aprovechado para pedir que se sepa «toda la verdad» sobre el asesinato del difunto mandatario y que «sus autores sean investigados y llevados ante la Justicia, con respeto a los principios del Estado de Derecho».