(dpa) – La empresa alemana K-Utec y la china CAMPC aspiran a construir una planta industrial de carbonato de litio en el Salar de Uyuni, en el suroeste de Bolivia, informó ayer el viceministro de Altas Tecnologías Energéticas, Luis Alberto Echazú.
«Estamos en la etapa de negociación para que una de ellas se convierta en socio nuestro en la etapa de industrialización de nuestro litio. Bolivia pretende ser el socio mayoritario», agregó.
La empresa alemana K-Utec está realizando el diseño final de la futura planta de litio que producirá 30.000 toneladas anuales de carbonato de litio del Salar de Uyuni. El diseño, pagado por el Estado boliviano, costó 5,2 millones de dólares.
Por su parte, la empresa china CAMC construye desde 2016 en Uyuni una fábrica de cloruro de potasio que producirá fertilizantes para la agricultura. A partir del próximo se producirán 350.000 toneladas de potasio al año.
Bolivia invertirá unos 942 millones de dólares para instalar varias plantas piloto de litio y una planta industrial en Uyuni donde existe un desierto de sal de unos 10.000 kilómetros cuadrados.
El precio de la tonelada de carbonato de litio ha subido desde 2.500 a 13.000 dólares en el período 2005-2016.
El litio es un metal blando de color blanco plata que tiene muchas aplicaciones, la más destacada la fabricación de baterías de dispositivos electrónicos y de vehículos eléctricos.
También se usa en aleaciones ligeras de aluminio en el sector aéreo y aeroespacial, así como en protecciones contra neutrones y como combustible en la tecnología nuclear. Además, las sales de litio se utilizan para tratar la depresión.
El presidente boliviano Evo Morales inauguró en agosto pasado cerca de la ciudad de Potosí una planta piloto de materiales catódicos que serán útiles para producir baterías de litio.
Esa planta, que fue construida por la empresa francesa ECM Greentech por unos 3,7 millones de dólares, producirá óxido de manganeso de litio y óxido de níquel, manganeso y cobalto de litio.