Reducir la pobreza, la brecha social y garantizar unas mínimas condiciones para una vida digna a toda la población, al tiempo que acciones para reducir el paro será la propuesta de Izquierda Unida para la próxima legislatura. El coordinador general de la formación, Manuel González Orviz , presentó esta mañana, junto al candidato a la presidencia de Asturias, Gaspar Llamazares, y la número 3 de su lista, María José Miranda, un “Plan de Rescate Social”, centrado en satisfacer, por encima de cualquier otro interés, las necesidades de la gente.
Un plan de rescate que se resume, explicó Orviz, en “10 propuestas más 1”, en referencia esa unidad a la reforma fiscal, precisamente en estos momentos en los que el resto de partidos han entrado en una “subasta” fiscal, pero sin entrar, de verdad, a cuestionar un modelo en el que, desde 1978, ha habido una bajada de impuestos a las rentas más altas al tiempo que se cargaba una mayor presión a las medias y bajas..
La primera medida será una ley asturiana de derechos vitales básicos” que daría soporte, y obligaría, a la toma de medidas para garantizar el respeto a los derechos fundamentales, ampliándolos, con servicios públicos de calidad y coberturas a necesidades como la vivienda, unos ingresos mínimos o un suministro vital de energía y agua. Una ley que, a juicio del coordinador, tendría que tener también un reflejo en el propio Estatuto de Autonomía
El Plan de rescate pasa por el desarrollo económico, según explicó el coordinador general de IU, para quien es imprescindible generar riqueza, empezando por preservar las actividades económicas tradicionales y apostar por nuevos sectores. Y es que, enfatizó Orviz, “para repartir el pastel tenemos que crear paste. Otra cuestión es que vamos a disputarnos los trozos de la tarta para que llegue a la mayoría”.
Y de forma inmediata para dar respuesta a necesidades que no pueden esperar a un cambio de coyuntura o una reactivación generadora de empleo, IU propone reforzar el salario social y bonos sociales para que las personas más desfavorecidas puedan hacer frente al suministro de energía eléctrica o gas y también para el agua.
La vivienda, el acceso, es otro de los puntos fuertes de este plan de rescate, con una apuesta clara por el alquiler, con ayudas tanto para el pago de la renta como para las rehabilitaciones de.
Se incluye como prioridad la preservación de la sanidad como un sistema público, universal, gratuito, solidario y eficiente, del mismo modo que se propone fortalecer el sistema educativo público, mejorar la asistencia a las personas mayores y en situación de dependencia.
Junto a la reactivación económica y la generación de riqueza, IU sitúa la reducción del paro como una prioridad. En este caso, se plantea la necesidad de formación, protección social y la incorporación de la perspectiva de género, así como de colectivos más vulnerables.
El rescate propuesto por IU no es, reconoció González Orviz, ni “nuevo ni novedoso”, pues ya se habían presentado en el ámbito nacional en el debate del Estado de la Nación siendo rechazadas por la mayoría del Congreso de los Diputados. Sin embargo, afirmó el coordinador general de IU, sí que es un plan de rescate “necesario”.
Este plan no podía ser novedoso pues continúa en la línea de IU de dar prioridad a las personas, con medidas claras de protección. Una perseverancia que se ve claramente reflejada en el sistema asturiano de bienestar. “Asturias y sus políticas sociales no se entienden sin Izquierda Unida. Tanto el Salario Social, como la Atención a la Dependencia, como la Sanidad, tienen mucho que ver con la influencia de Izquierda Unida”.
Por su parte, María José Miranda, recalcó que este plan es imprescindible, tanto en lo relativo a las necesidades que sufre una buena parte de la población como desde un punto de vista legal si se quiere cumplir con el objetivo de la estrategia europea 2020 para reducir el número de personas en situación de exclusión y, también, el mandato del Consejo Social Europeo, que reclama el plan de rescate social para garantizar el éxito de la estrategia 2020.