Dresde (Alemania), 5 feb (dpa) – El movimiento islamófobo y xenófobo alemán Pegida busca unirse mejor con los que piensan como ellos y a tal efecto realizará marchas y concentraciones mañana en ciudades de diversos países europeos con el objetivo de crear una «fortaleza europea» contra la «islamización de Occidente».
Los actos de Pegida (siglas en alemán de «Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente») buscan así dar el salto de su feudo en Dresde a ciudades como Varsovia, Tallin, Bratislava, Praga, Ámsterdam o Birmingham con una primera acción internacional.
Asimismo, los partidarios del movimiento islamófobo tienen previsto concentraciones en Dresde, donde se originó el movimiento en el otoño boreal de 2014.
La líder de Pegida Tatjana Festerling anunció que representantes de movimientos ciudadanos y partidos de la República Checa, Eslovaquia, Polonia, Austria, Bulgaria, Finlandia, Países Bajos, Estonia, Italia y Alemania se reunieron hace poco cerca de Praga para firmar una «Declaración de Praga» y acordar una manera de proceder común.
La que es una de las caras más visibles de Pegida explicó que durante los actos del sábado se realizarán conexiones en vivo con los diversos escenarios.
«Con independencia de la Unión Europea y de los habituales círculos elitistas desarrollaremos la red de patriotas europeos hasta convertirla en una fortaleza europea», afirmó Festerling.
Esta fortaleza deberá proteger del «intercambio de población y con ello de la inherente islamización de Europa», indicó. «Una sumisión está descartada», dejó claro la activista de Pegida al mismo tiempo que calificó a Dresde como «la capital de la resistencia alemana».
En la «Declaración de Praga» se especifica que los mil años de historia de la civilización occidental pueden llegar pronto a su fin por «la conquista islámica de Europa».
«No cederemos Europa a nuestros enemigos», aseguraron los firmantes. «Estamos preparados para arriesgar nuestra libertad, nuestro patrimonio, nuestra profesión y carreras, y quizá también nuestra vida», agregaron.
En un video para movilizar a los simpatizantes para que acudan mañana a las concentraciones, Festerling pinta una dura imagen de la situación y alerta que Alemania está a las puertas del desmoronamiento.
El país está lleno de «hombres musulmanes sin escrúpulos embrutecidos» que muestran diariamente con su falta de respeto, ataques agresivos, asaltos sexuales y violaciones lo que esperan de una cultura de bienvenida, afirmó durante el video.
Para el politólogo alemán Werner J.Patzelt, es lógico que Pegida busque ahora unirse con otros. El movimiento es una parte del populismo europeo de derecha, igual que el partido Alternativa para Alemania (AfD), explicó.
«Por ello es comprensible que busquen aliados en otros movimientos populistas de la derecha. Pegida siempre ha querido mostrar que no es un movimiento chovinista alemán, sino que se encarga de un problema que afecta a todos los países europeos», analizó.
La cúpula de Pegida se dividirá el sábado por diferentes ciudades. Lutz Bachmann recibirá a invitados procedentes del extranjero en Dresde. El director de la junta de Pegida, Siegfried Däbritz, hablará en Bratislava y Festerling en Varsovia.
El grupo viene intentando beneficiarse de la polémica por la ola de refugiados que está recibiendo Alemania (1,1 millones sólo en 2015) y del escándalo de Nochevieja en Colonia, cuando cientos de mujeres fueron víctimas de robos y agresiones sexuales atribuidas a «hombres de origen árabe y norteafricano».
Por Jörg Schurig