Berlín, 26 ene (dpa) – El servicio secreto del Ejército alemán investiga a 550 soldados sospechosos de ser extremistas de derechas, 360 de ellos añadidos a la lista en 2019, según informó el director del Servicio de Contrainteligencia Militar de Alemania (MAD), Christof Gramm, al dominical «Welt am Sonntag».
El director del ente detalló que catorce extremistas, incluidos ocho de extrema derecha, fueron imputados, y que el servicio secreto identificó a 40 personas por «falta de lealtad a la Constitución».
Gramm anunció que en 2020 se publicará por primera vez un informe oficial de actividad del MAD. El Comisario Parlamentario de las Fuerzas Armadas, Hans-Peter Bartels, había exigido recientemente un informe de este tipo.
El director del MAD explicó que su departamento trabaja en la actualidad en unos 20 casos sospechosos de extremismo de derechas en la unidad de élite KSK, de las fuerzas especiales.
A principios de 2019 la cifra era la mitad, según Gramm, lo que significa que el número de casos sospechosos en el KSK es alrededor de cinco veces mayor que en el resto de unidades, basándose en la cantidad de personal asignado.
Gramm contradijo la impresión de que había un «ejército en la sombra» en el Bundeswehr, y subrayó que las denuncias recibidas fueron tomadas muy en serio e investigadas profundamente.
«En este procedimiento identificamos a extremistas y a personas con falta de lealtad a la Constitución, algunos de los cuales se conocen entre sí. Sin embargo, no encontramos un grupo organizado, con objetivos y propósitos concretos, tal vez incluso violento, que quiera poner en peligro a nuestro Estado”, explicó en detalle.
En la opinión de Gramm, el caso de Franco A. tuvo efectos de gran alcance. El soldado se registró como refugiado sirio y, según el Fiscal General, planeaba un atentado terrorista. «Esto fue una llamada de atención para proceder a un desarrollo más amplio del MAD», señaló.